¿Nueva amiga?

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Gianna

La comida que había preparado Joanna estaba muy deliciosa, tiene talento en la cocina. Todo estaba muy silencioso, la fuerte lluvia no paraba, la tormenta aumentaba cada vez más. Estaba muy preocupada por mis padres, deben estar furiosos.

Después de comer, comenzamos a hablar sobre temas al azar, Alex preparó unos chocolates calientes para sentirnos mejor, hacía un frío terrible. Creo que ya llegó el invierno.
Como ya era muy tarde, las chicas se fueron a dormir, menos Alex y yo.

-¿Esta casa de quien es? -Pregunté para romper el silencio incómodo que había en la sala.

-De todas aunque los papeles los tiene Edward, él quiso comprar esta casa como uno de nuestros refugios -Respondió antes de tomar un sorbo de su chocolate.

-¿Refugios? -No sabía que tenían lugares para reunirse o esconderse, Edward nunca me contó sobre esto.

-Sí, sabes que tenemos muchos enemigos y tenemos que escondernos a veces, sólo los que pertenecen al grupo saben donde están ubicados -Alex parecía un poco incómoda, ninguna de las dos podía dormir.

Nuevamente surgió un silencio incómodo, no somos amigas y es raro estar juntas en estos momentos. Parecía estar preocupada por algo o por alguien, estaba cubierta con una sábana y tenía puesto un abrigo.
Ella me brindó una almohada y una sábana, le pertenecían a Susan y, como ya no está, me la dieron a mi.

-¿Quieres que te preste mi celular? Tus padres deben estar preocupados -Le quitó la clave a su telefono y me lo dio, le agradecí y marqué el número de mi padre.

-¿Hola? -Pregunté un poco temerosa, mi padre debería estar furioso.

-¿Gianna? ¿dónde estás? Estamos muy preocupados -Respondió aliviado y calmado, no estaba enojado. El volumen estaba un poco alto, me sentía incómoda ya que Alex estaba oyendo todo.

-Estoy en la casa de... una amiga -Miré a Alex, ella abrió los ojos como platos, no esperaba que dijera eso-. Tuve que quedarme en su casa por la tormenta, te llamo para que no estés preocupado y supieras que estoy bien. Mi celular está descargado.

-¿Estás con Luna? -Mi padre solamente conoce a Luna y a George, para él sólo tengo dos amigos.

-No, es una compañera del colegio... es nueva -Alex no es mi amiga, pero no tuve otra opción que mentirle, no podía decirle que estaba en un lugar peligroso con personas que están metidas en innumerables problemas.

-¿Tienes los medicamentos? -No me acordaba de las medicinas, mi madre a lo mejor las necesita urgentemente.

-Si, ¿mi madre está bien? ¿los necesita? -Estaba muy preocupada por ella, no quería que le pasara algo por mi culpa.

-No te preocupes, ella comienza a tomarlos a partir de mañana. Debes quedarte con tu amiga, la tormenta está muy fuerte y es peligroso -Me quedé en shock, ¿voy a tener que dormir aquí? ¿con Alex? No pensé que me permitiera quedarme, él nunca me permite estar con gente que él no conoce-. Duerme bien, llámame si te pasa algo. Mañana vamos a hablar.

Con la última frase que dijo mi padre supe que no estaba del todo calmado, mañana me espera un interrogatorio muy largo. Me despedí y le entregué el teléfono a Alex, gracias al cielo entró la señal y pude hablar con él, aunque sé que está furioso y va a querer saber el mínimo detalle.

-Así que... ¿vas a dormir aquí? -Sé que a Alex no le gusta para nada esto, pero no tengo otra opción.

-¿Puedo? No quiero incomodar -No me gusta para nada la idea de dormir junto a ella, no tengo ropa para cambiarme y no voy a poder dormir en mi cama.

At The Wrong Time [En edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora