Capítulo I

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(Justin)

Hoy era el gran día, nos mudaríamos con Lucy a un pequeño departamento cerca de nuestra universidad, nunca pensamos que fuéramos aceptados, fue una gran noticias que nos hizo motivarnos y buscar como locos, fue un largo proceso de selección, unos eran muy pequeños, otros estaban en lugares muy ruidos, etc. Pero lo conseguimos, ahora viviríamos juntos para abaratar costos.

Yo tenía todas mis cosas empacadas para la mudanza, era difícil ver mi habitación casi vacía, era pieza importante de recuerdo, aquí es donde hacíamos cada locura con Lucy.

Y hablando de Lucy, esa holgazana ¿estará despierta? ella era de sueño pesado y bastante pesado, podrías estar gritando a su lado y ella no despertará, okey, dramatizo un poco pero fuera lo que fuera, Lucy era mi amiga y la amaba así, sip, la amaba, hace más de un año, o más, me di cuenta que estaba jodidamente enamorado de ella, lo negaba y lo ocultaba lo más que podía pero era algo casi imposible.

Saco mi celular para despertar a Lucy ya que lo más probable es que este ahora en el país de nunca jamás.

-Alo?-me responde con una voz somnolienta.

-¿Te he despertado?-le digo riendo.

-No para nada-me dice con sarcasmo y creo que bosteza-si, me has despertado y en uno de mis mejores sueños, estaba a centímetros de besar a Drake.

-Qué pena que sólo sea un sueño- A veces Lucy me daba miedo, tenía una obsesión bastante rara con Drake, ella podría hablarme las 24 horas del día de él. Me importaba un carajo, pero aún así la escuchaba.

-Bueno Señor Bieber déjame creer en mis sueños-se detiene un momento- Además ¿Por qué me llamas a esta hora?

-Te llamo para contarte una linda historia, había una vez una niña, que prefiero no decir su nombre, ella tenía un mejor amigo y hoy se muda con él pero parece que ella lo ha olvidado entonces por eso su amigo la llama para que despierte del vil sueño de la malvada y terrorífica almohada.

-Mierda la mudanza-se queja- para mi defensa el despertador no sonó.

-Tú nunca has tenido despertador-Le informo.

-Mierda, he sido atrapada pero no  preocupes sólo me tengo que vestir, he empacado todo ayer.

-Eso es un alivio, ya me hacia la idea de que tendríamos que mudarnos el próximo mes.

-Exagerado-me regaña y río.

-Lucy, las chica son indecisas, no sabrías que llevarte y que dejar, además tienen un montón de libros y tengo el presentimiento que traerás muchas cosas.

-Te quivocas dejare demasiadas cosas en casa, ya que mi mamá no quiere sentir que no voy a volveré y bla bla bla, bueno ya tu sabes como es mi madre.

-Rara, traerás tus libros, ¿verdad?

-Son mis bebés, claro que irán.

-Estoy perdido, no habrá espacio para mis libros.

-No exageres, tengo pocos.

-¿Pocos? Tu habitación parece biblioteca.

-Bueno para mi, ser una biblioteca es poco.

-Para ti todo es poco-Ella bufa.

-Bueno señor exagerado, el punto es que ya esta todo listo ahora ¿Me dejarás vestirme de una vez?

-¿Quieres que te ayude a vestirte? soy de manos ágiles-Ella ríe.

-En tus sueños, cariño.

-No digas, que no lo intente.

-Ya-Ella ríe- Adiós, no quiero retrasarme más, nos vemos.

-Nos vemos, princesa-le digo antes de colgar.

Sólo puedo decir que me tiene completamente loco, Lucy era diferente, era la única chica que conocías todas mis facetas y seguía a mi lado.

En en instituto tenía la popularidad de chico malo, muchos me temían y las chicas siempre se acercaban a mi, no para ser mis amigas, siempre era el trofeo de ellas, ya que era "el chico imposible", además nunca me importo tratar bien a esas chicas, nunca se dieron el tiempo de conocerme, sólo me deseaban porque sabían que no podían tenerme, no completamente, era un revolcón y nada mas, pero Lucy nunca quiso eso, siempre estuvo a mi lado netamente para ser amigos. La conozco desde que tenía 6 años, fue mi primera amiga, éramos inseparables, soportamos todos, a los 15 años tuve que mudarme a Canadá por el divorcio de mis padres, Lucy siempre me llamaba desde New York, nunca perdimos el contacto.
A los 17 volví a New York, nuestra  amistad se fortaleció, pero no sé si fue el cambio o el hecho de que no la veía hace dos años pero cuando nos reencontramos estaba más hermosa que nunca, su piel estaba más bronceada, su de pelo castaño ondulado, combinado con esos ojos azules. Nunca acepte mis sentimientos hacia Lucy, siempre me dije que la adoraba como una hermana pero ya cuando cumplí 18 no lo aguante más, mis métodos para sacarla de mi mente se acaban y ahí me di cuenta que estaba perdido.

El fuerte sonido de una bocina me vuelve al presente, ya era hora de partir. Esto iba a ser difícil, no tenía idea de que iba hacer con todos estos sentimiento, ni menos ahora que la iba a tener a mi lado todos los días.

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Chicas está novela es mía, espero que les guste :D

Enamorado de mi mejor amigaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora