Winter [BORRADOR]

Capítulo 19

Los estudiantes murmullan por la pequeña escena que nuevamente montaron Winter y Summer, unos dicen que el invierno y el verano no pueden estar juntos porque destruirían el mundo, otro que no respetan los lugares públicos para hacer porquerías y el resto sólo mira y escucha. Travis tiene sus ojos enterrados en ella y se percata de eso, Summer tiene una sonrisa de oreja a oreja, viéndole la cara a Winter. 

— ¿Hacemos un trío? —Pregunta Meadow. 

—Ve a meterte la serpiente de tu hermana por el trasero —Responde al hada de la pradera. Winter había oído que las hadas eran las más grandes zorras en el plano irreal, pero nunca se imaginó cuanto.  

La chica se pone de pie y le pisa la mano sin piedad a Summer, lo odia, ¿Cómo puede existir alguien que bromea por todo? Se arrepiente de haberlo salvado aquel día en el lago, hubiera dejado que se ahogara y matado a su sucesor. Sale del ascensor entre el tumulto de estudiantes, Travis la toma del antebrazo y la detiene. 

— ¿Para dónde vas?

—A Oslo, espero que no me sigas como lo has hecho varias veces, si vuelves a hacerlo, juro que voy a matarte —Amenaza. Mueve su cabello con arrogancia y alza el mentón.

—Lo haré porque ha sido una orden de su majestad Aurora desde hace ya un año. 

—Sígueme y no te quedarán ni los huesos. 

—Nunca conocí un invernal tan cabeza hueca como tú —Insulta a Winter sin piedad.  

—Y yo a ningún estúpido con tantas ganas de morir como tú. Cuando llegue al trono, juro que te lanzaré al laberinto del olvido para que Macabra te viole —Se va sin decir nada más, no peleará con ese baboso y arruinará su día libre por culpa de él. Tiene suficiente dinero que le robó a Summer sin que se diera cuenta.   

No sabe que hacer en la ciudad, sólo conoce los lugares que recorrió con Summer, pero no se dará por vencida en la gran ciudad, irá a explorar y conocer más, ella no tiene límites para nada, si desea hacer algo, lo hace incluso si le sale mal, cuando fracasa le echa la culpa a los demás para sentirse bien y volver a empezar, pero nunca agacha la mirada, siempre está con ella en alto aunque muchas veces no colaboren las circunstancias. 

El tráfico está como loco, Winter no recuerda cómo se toma un taxi, entonces opta por caminar hasta la tienda de dulces a la que fue con Summer. Estando ya allí compra chocolates blancos y una bolsa de uvas pasas para mostrarle a sus amigos el gran parecido que tienen con la maestra Luz Del Sol. Se sienta en una mesa y abre uno de ellos mientras mira pasar a las personas por la ventana, todos la miran, pues el color de su piel es demasiado raro y llamativo al mismo tiempo. Ella es distinta a los demás, es única entre todos ellos y es lo que la hace especial. 

Ya la noche está cayendo y ella sigue en el mismo lugar bebiendo fríos refrescos; el cielo de noche no le gusta mirar, pero no puede dejar de hacerlo, ver el cielo de noche la hace recordar que está sola en este gran mundo y lo odia, no hay ninguna luz que brille en ella, está en la oscuridad como su madre. Y aunque sus padre ya no están a su lado, aún guarda una pequeña esperanza que volverán nuevamente sano y salvos. 

A veces desea poder sonreír porque se siente feliz, o porque simplemente está bien, pero las sonrisas sinceras nunca le salen aunque lo quiera. Parte de los que siente no puede dárselo a alguien más porque terminaría como su mamá: Completamente rota y sin el ser que ama. ¿Dónde se encuentra el amor dentro de ella? ¿Puede amar sin tener corazón? ¿Alguien la querrá abrazar?, aún así, si los día pasan siempre se hará las mismas preguntas, hay cosas de las que no puede hablar, así como el amor que ella no puede dar, pero aún así, desea que haya alguien en el fondo de ella. 

Puede ver a Travis sentado en una mesa al fondo del lugar, hierve de la rabia porque tal parece que él no entendió cuando ella le advirtió que no la siguiera, pero aún así lo hizo, es un retrasado mental. Sólo ahora es que se da cuenta que se ha comido todos los chocolates que había comprado y no dejó ninguno para llevar a la escuela. Se pone de pie, ignorando a Travis que la mira fijamente y toma otros chocolates blancos y va a que los facturen. Alguien tapa su vista con las manos y ella no está para bromas, pero no puede utilizar sus poderes así que calcula bien y pisa con brusquedad a quien no la deja ver. 

—Vaya que tienes un carácter fuerte —Bromea Summer con cara de dolor   —, te demandaré por agresiones personales —Molesta. 

— ¿Me estás siguiendo también? —Dice. 

— ¿Qué? No, sólo vine por unos dulces, iré a una fogata con unos amigos esta noche. 

—Bien —Se aleja ella hacia la salida. 

— ¡Espera! —Corre hacia ella y le toma el antebrazo.   

— ¿Qué?

— ¿Quién te está siguiendo? 

—Travis, está loco, mejor me voy a la escuela antes que me den ganas de matarlo. 

—Mejor ven conmigo a la fogata, tengo mi moto aparcada allá afuera, él no podrá alcanzarnos. 

—Claro que no —Arquea las cejas —, tus amigos pensarán que estamos saliendo, no puedo ni imaginar eso, me produces ganas de vomitar, eres como vomitar y luego comerme el vómito. 

—Yo no soy vómito, sí, soy un vómito sexy...¿Recuerdas que perdiste la apuesta? Tienes que concederme un deseo y lo que quiero es que vengas conmigo —Le reprocha. Ella no puede hacer nada, los seres invernales nunca rompen una promesa. 

Pone los ojos en blanco —Bien, iré contigo. 

Una moto ecosse heretic titanium negra está aparcada frente a la tienda, Winter no tiene ni idea de lo que es una moto, mira asombrada el aparato. Summer no tiene ni un sólo casco, le gusta la adrenalina y sentir que el aire le da fuertes besos. 

Travis trata de detenerlos pero no llega a tiempo, ya van a casi treinta metros de donde él está y corren como el viento en el grandioso aparato. Summer va con tanta velocidad que Winter siente miedo, entonces se sujeta de la camisa del chico por miedo a caer; entierras sus uñas en él y a él se le escapa una pequeña sonrisa, anhela ver la cara de Winter en ese momento. Sus mejillas quieren volar y sus ojos lagrimean por las ráfagas de aire que chocan contra ella, con el paso de los minutos, Winter va tomando confianza, la adrenalina le corre por las venas, tiene ganas de gritar como loca por tantas emociones que se le cruzan. 

Al bajar de la moto, sus cabellos están alborotados, Summer se ríe y se los acomoda, ella de manera salvaje le da un manotazo para que no la toque. 

La playa de Oslo en la noche da una vista hermosa y calmada, la brisa fría y veraniega hace que Winter sienta paz en su interior, el sonido de las olas es relajante, es como si flotaras en el aire con ese sonido. A pocos metros visualizan el fuego de gran tamaño y varios chicos y una chica sentados alrededor de la gran llama, beben refrescos y ríen. 

—Vaya, me trajiste a un lugar donde hay puros estúpidos como tú. 

—Te divertirás —La toma del brazo y la arrastra hacia la fogata.  

Mini-maratón 1/2

Causa: ¡Winter es #13 en el ranking!

Les agradezco mucho a todos los que me leen, significa mucho para mí que esto pase, así que sigan leyendo y disfruten estos capítulos porque es todo gracias a ustedes, sigan leyendo, ¡Algún día llegaremos a ser #1 en el ranking!