XX

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Si no fuera por ese dichoso beso, me hubiera dado lo mismo ser igual de cuidadoso que él conmigo al lavarle la espalda, pero después de eso me daban muchas ganas de sacarle de quicio tanto como él me estaba tocando a mí los coj**** con todas sus peticiones una detrás de otra respaldadas por ese maldito "forma parte del contrato" y el dichoso "entonces me llevaré el dinero" que tantas veces ha repetido ya.

Pero claro, no podía seguir comportándome como un capullo porque sino el perro éste iba a empeorar las cosas. Y de todas formas acabaría ganando él. Porque el universo está en mi contra.

Así que me limité a ser bondadoso con su estúpida y sucia espalda.

Una vez logré terminar, volvimos a echarnos agua para deshacernos del jabón y poder entrar de una buena vez a la bañera.
Hijikata, como era habitual ya, fue el primero. Se acomodó y suspiró con los ojos cerrados; seguidamente, dirigió la mirada hacia mí.

—Entra —ordenó.

—Sí, sí... —murmuré desganado, con la intención de colocarme en el lado inverso.

—Oi —me llamó la atención—. Por ahí no —aclaró, y señaló su lado de la bañera con la cabeza.

—¿Bromeas? —pregunté casi con desesperación—. ¿No hemos estado ya demasiado tiempo pegados el uno al otro?

—Me da lo mismo lo que quieras, Gintoki —aclaró—. Ven.

Solté un quejido y continué maldiciendo a todos los dioses existentes, acercándome irremediablemente al lado en el que estaba Hijikata y acomodándome justo delante de él.
Tosshi decidió que la mejor idea que se le podía haber ocurrido era abrazarme desde atrás y apoyar su cabeza sobre mi hombro como si fuera una almohada.

Suspiró.

—¡Tosshiiiii! —le llamé, incómodo—. Necesito hacerte una pregunta.

—¿Ah? —murmuró vagamente.

—¿Se puede saber por qué demonios has estado llamándome de formas dis... tin...--

Me detuve al darme cuenta de que, aunque hubiese hecho la pregunta, no habría conseguido ninguna respuesta.

¿Que por qué?

Porque Hijikata se acaba de dormir abrazado a mí y usándome como almohada.

En la bañera.

Completamente desnudos.

Después de haber profanado mi cuerpo.

Y justo antes de que pudiera averiguar el por qué había estado llamándome de formas distintas.

¿¡Bromeas!?

¿¡Esto va enserio!?

¿¿¡¡Por qué justo ahora!!??

¡¡Estúpido autor, deja de torturarme de esta forma, joder!!

¡¡Yo soy el narrador, debería poder decidir qué pasa y qué no, e incluso cómo y cuándo!!

¿¡Es que no se supone que esta basura de fanfic tiene el nombre de MI tienda!?

¿¿¡Qué clase de lógica es ésta!??

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Yo decido lo que pasa dentro de la historia porque es mi puto fic. Estúpido canoso (con amor <3 ).

En fin, a lo que iba, ¿debería caer en la moda y hacer un especial de Halloween o algo así?

(Aunque aviso que, en caso de escribirlo, lo más probable es que haya que esperar hasta el año nuevo del 3.700 porque, debo confesar, soy un koala xD)

Yorozuya Gin-chanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora