La Chica Mala |H.S|

Capítulo 17: Amenaza.

Punto de Vista de Harry:

La situación de la ropa tenía a Mandy muy a la defensiva, juraba que había sido Paige quien le había hecho semejante cosa y por más que quisiera creerle no podía, simplemente no podía pensar en Paige haciendo tal cosa.

— ¿Qué?—pregunté cuando escuché lo que me dijo.

— ¿Cuando me vas a llevar a tu casa? ¿Cuándo conoceré a tu hermana, a tus padres?

—Amanda, ¿No dijimos que llevaríamos las cosas tranquilas?—cuestioné viéndola, el semáforo estaba en rojo.

—Sí, sé que acordamos ir sin apuros, pero las chicas murmuran cosas.

—Te dije que dirían mil cosas de nosotros—recordé. Tenía el ceño fruncido, estaba tan preocupada. —Haber, cuéntame, ¿Qué dicen?

—Que me estás usando, que estás conmigo para enfurecer a Paige.

— ¿Hacer enojar a Paige?—pregunté. — ¡Demonios!, eso es mentira, yo jamás te usaría y menos para algo así.

—Eso es lo que dicen, y comienzo a creer que tienen razón—añadió, por fortuna habíamos llegado a su casa.

—Amanda, me gustas mucho—le dije. —pero hasta para mí es muy rápido. Mis padres aún creen que salgo con Paige, necesitarán tiempo para adaptarse a un cambio.

— ¿Y por qué no se los dices ya? Así tendrán más tiempo para hacerse a la idea.

—Mis padres han amado a Paige desde que nació, la vieron crecer junto a mí, y creen que es la mujer de mi vida, yo sé que no es así, y no será tan fácil hacerlos entender.

—Quizá tú no quieres que ellos se enteren, al final de cuentas vas a regresar con ella.

—No tengo pensado volver con Paige, entiéndelo, estoy contigo ahora y no debería importarnos nada más.

—Quiero hacer esto oficial, quiero estar segura de que no me estás usando, de que no soy un maldito juego para ti, que de verdad me quieres.

—Ya te he dicho que no estoy jugando contigo, que en verdad te quiero. ¿No te basta con eso?—pregunté. No respondió. —Amanda, quizá todo esto esta...—me interrumpió.

—Tienen razón—dijo—Todas ellas tienen razón, tú me mientes—añadió bajándose del carro y corriendo a su casa, fui tras ella pero no la alcance. Llamé varias veces pero no abrió.

Inicio de Flashback.

— ¿Qué quieres?—preguntó atravesando el salón, llevaba puesta una blusa azul de tirantes y una falda de mezclilla que mostraba sus piernas perfectas.

—Necesito hablar contigo—murmuré poniéndome de pie y caminando hacia ella, la tome de la cintura obligándola a estar cerca.

— ¡Suéltame!—pidió intentando zafarse.

—Tienes que escucharme—pedí. Se negó.

—No tengo nada que escuchar de ti, ya me quedo claro que no signifique, no significo y no significare nada para ti, entendí que no debí haber estado contigo nunca, que jamás debí creer que lo nuestro era especial.

—Sé que esto fue muy repentino, pero estoy en lo correcto al hacerlo, necesitas cambiar Paige, es por tu bien.

— ¿Por mi bien?—asentí. —Si de verdad te preocupas por mí, aléjate, déjame rehacer mi vida lejos de ti, tu solo me haces daño.

—Necesitas entenderme, tienes que disfrutar tu vida, Paige, ¡Tienes 17 años y yo he sido tu único novio!

—Eso era porque creí que no necesitaba a nadie más—murmuró. El timbre de la casa resonó, alguien había llegado.