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Levanto la vista mientras me permito mirar con sorpresa el lugar sin saber como reaccionar, es un bonito edificio estilo ochentas pintado con colores pastel y una gran cantidad de plantas fuera, un fuerte olor a incienso de sándalo se deja oler desde su interior, en los aparadores que se ven desde aquí afuera alcanzo a mirar una colección de cosas extrañas, desde objetos religiosos hasta artefactos para brujerías que conozco bien por el simple hecho de que quizás las vi de cerca alguna vez y las encuentro familiares, se puede sentir cierta presencia en el lugar que inspira respeto, en la vidriera se deja ver un texto con letras grandes y coloridas que anuncia el nombre del lugar.

Madame Charlotte... Adivina y vidente...

No muy convencida me acerco a la entrada sintiendo atracción espiritual por parte de el extraño lugar, cuando estoy en el pórtico tomo un poco de aire y medito sobre entrar ¿será buena idea? ¿Como me va a afectar esto a futuro? ¿Me importa realmente si me afecta? Cuando una negativa me sale a modo de respuesta entro con cautela a la tienda mientras miro por todos lados sintiendo algo de miedo pero me muestro reacia a demostrarlo abiertamente, siento como si mi interior me dijera que hay respuestas aquí, miro el primer estante y me siento un poco intrigada del como es legal que se vendan cabezas reducidas de verdad, hay rostros de ancianos, de jóvenes y niños, hay lencería con ciertas cosas, velas rojas, cosas extrañas en frascos de formol, corazones de pollo, plumas de gallo, muñecos para vudú, libros interesantes sobre hechicería, incluso hay pentagramas y atrapa sueños un poco distintos a los que normalmente se venden en cualquier tienda falsa de esoterismo.

-te estaba esperando.-dice una voz detrás de mi y lanzo por puro instinto una daga pero es detenida por una misteriosa silueta.

-has un movimiento brusco y mueres.-digo fría como el hielo mirando a esa extraña silueta.-si vas a matarme pelea y sal como los hombres.-digo desafiante pero se escucha una risa.

-en primera, no te haré daño y en segunda, no aplica por que soy una mujer.-dice saliendo de la oscuridad y me relajo un poco al verla, pero no completamente puesto que es terreno desconocido.

Es una mujer algo mayor, su cabello castaño canoso le llega hasta más abajo de la cintura, usa una ropa extraña parecida a los de las mujeres que bailan en la India de color rojo, tiene las uñas largas y algo descuidadas pintadas de un escandaloso color rojo carmesí, sus dedos algo delgados y huesudos exponen varios anillos con piedras preciosas, desde rubíes hasta esmeraldas, sus ojos son profundos, tiene puesta una bonita sombra de ojos color verde esmeralda en sus párpados, combina muy bien con sus ojos extrañamente azules, parecen normales pero tienen algo en ellos que no se descifrar a ciencia cierta, es alta de rasgos rusos pero se mezclan mucho con rasgos de la India, aparenta mas de cincuenta años de edad, un gato de color blanco con un ojo azul y el otro amarillo se acerca a pasos lentos a donde estamos ambas, no hace ni siquiera un ruido, es un gatito esbelto y de cuerpo perfectamente ágil, pareciera como si pensara de forma humana mientras me observa con detenimiento, analizándome de forma profunda, los ojos del gato son de colores muy vivos en cuanto a matices, el ojo azul es como el cielo mientras que el otro es como las vivas llamas del fuego de una hoguera, me siento extraña en este lugar, se siente seguro y relajante pero hay muchas cosas extrañas, dejo un poco el estrés, minutos después me permito a mi misma relajarme un poquito más y volver a respirar mientras una silla se acerca detrás de mi y por una fuerza extraña caigo sentada sobre ella.

-¿pero que dem?...-no alcanzo a terminar por que de improvisto, no se como llegó tan cerca la mujer, está tomando mi mano mientras realiza una lectura.

-seiscientos treinta años de edad aproximadamente, quizás más... Raza vampírica hibridizada con ángel y muchas criaturas más.-dice en un susurro mientras siento el miedo invadirme.-un desastre amoroso en tu pasado, hermano traicionero, peleas constantes y huídas cada ciertos años.-dice mientras una extraña paz comienza a invadirme y comienzo a relajarme.

Alma Sin Memorias; Mi Vida PasadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora