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Narra Zaria:

-tranquila, todo irá bien.-me dijo Roberto en un susurro mientras yo estaba hecha bolita en la cama junto a él, ya era de mañana y el rato bueno de hacía unas horas se había desvanecido de pronto para mi, me sentía triste, me sentía extraña, me sentía voluble.

Me siento todavía más culpable por estar riendo mientras ella llora...

Estábamos en nuestra pequeña habitación de una de las seis cabañas rentadas en ese lugar desolado en medio de la nieve, me sorprendía que hubiera cobertura bastante buena debido al factor climático pero Azari me explicó antes de venir que los celulares nuevos aquí podían tomar señal satelital sin problemas y el mío lo era, bien estando aquí me sentía alejada de los problemas, había estado usando solo DesBook y DesChat desde hacía un rato mirando bobadas junto a Roberto, no quería abrir DesUp Por que sabía que si veía los mensajes de mis padres me sentiría terriblemente mal, al mirar bien el lugar la habitación era bastante bonita, un acabado de madera que aislaba bastante bien el calor por dentro, muebles modestos color madera oscuros, una televisión bastante grande frente a la cama, un escritorio, un baño, dos clósets, un pequeño comedor contiguo junto a la cocina bien equipada y un pequeño cuarto para meter algunas cosas, en ese cuarto había un pequeño sofá disponible que debió ser dejado como mueble extra, el espacio había resultado bastante bien para los dos, yo no había traído mucha ropa a decir verdad, esto de ser vampiro era muy raro, casi no comía, no sudaba, no me ensuciaba y no ensuciaba casi nada la ropa a usar a menos que estuviera en un lugar sucio, hasta olía bien todo el tiempo, Roberto tenía ese característico olor a vainilla que le encontré desde el primer día que lo conocí, estaba solamente en bóxer revelando casi toda su anatomía frente a mis tímidos ojos, yo traía puesta una blusa de mangas largas ceñida color blanco con cuello en uve aunada a un bóxer negro de algodón, no llevaba nada más y menos un sujetador por la incomodidad de esa prenda, pensé varias veces en hacer otras cosas con él en ese momento pero no me sentía nada bien como para eso de ninguna manera, él entendió eso sin que se lo dijera y en lugar de ponerse en modo horny estaba más intentando animarme con historias y datos interesantes, entendía que él no supiera consolar a alguien pero lo que realmente necesitaba era cariño, algo que no me hiciera sentir distanciada de alguien.

No quiero sentirme sola...

-no, nada está bien... Ya estoy harta de fingir que sí.-dije con desánimo, con cansancio y ya sin molestarme en fingir, respiré hondo y luego suspiré para después sentarme, él hizo lo mismo y nos miramos de frente.-¿me das un abrazo?... ¿Podrías quedarte aquí conmigo?.-pregunté a punto de llorar, su expresión de angustia me dejó en claro que lo intentaba con todas sus fuerzas.

-hey, no llores chaparrita.-escuché que dijo con su voz más frágil antes de tomarme del brazo y atraerme hasta él, el calor de su cuerpo me recibió junto a su piel desnuda y entonces apoyé la frente en su pecho, sintiéndome temblar.

Todo se me está derrumbando como arena de mar formando un castillo devastado por las olas...

-siento que todo se me está yendo de las manos.-dije antes de romper a llorar, mis brazos le rodearon la espalda y me pegué más a él.-mi familia me odia... Son todo lo que tengo, ¿como pueden hacerme esto?.-pregunté antes de que él acariciara mi cabello con suavidad.

-me tienes a mi también.-dijo en un murmullo bajito, ante eso yo negué con la cabeza.

-tengo miedo, ¿como sé que vas a quedarte siempre?.-pregunté con desesperación, él me miró con pena unos momentos.

-no podemos saberlo, la vida es así, pero disfrutemos ahora que estamos juntos, estoy siendo muy feliz aquí contigo, tenemos que ver si podemos llegar a formar un futuro juntos.-dijo él despertando más dudas en mi, ¿no podemos saberlo? ¿Estaba dudando? Eso me hizo sentir frío, no era lo que quería escuchar, sabía que era la verdad pero esperaba que prometiera estar conmigo siempre, por un momento las palabras de mi papá antes de irme me sonaron en la cabeza.

Alma Sin Memorias; Mi Vida PasadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora