Alma Sin Memorias; Mi Vida Pasada

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Narra Azari:

Después de otro operativo exitoso habíamos ido con Johan a discutir unos cuantos términos de mi custodia, se suponía que un humano normal tenía independencia de sus padres hasta tener dieciocho años, pero en nuestra sociedad como vampiros era diferente debido a lo conservador del asunto, nosotros estábamos regidos por el antiguo sistema debido a nuestras fechas de nacimiento y años de registro, por ello mismo se establecía que al ser mujer eran los padres los que tenían primeramente las decisiones sobre las hijas de por vida y de este modo mi madre podía meter presión legal a su antojo sobre mi vida, en pocas palabras si no cambiaba de guardián legal mi madre podría encontrar la forma de quitarme todo lo que estaba siendo y podría ser, habíamos charlado de todo eso en la mesa más apartada de un café dentro del fraccionamiento mientras desayunabamos algo, habíamos decidido faltar a clases el día de hoy y era temprano, el operativo había sido llevado a cabo a las ocho y ahora eran las diez de la mañana, Johan se encontraba frente a nosotros en una mesa cuadrada con una torre de panqueques con miel y mantequilla, al centro habían servilletas y aderezos dulces, frente a mi había un plato igual pero cubierto con leche condensada, seis rebanadas de pan francés con leche condensada y un gran batido de fresas para beber, Oliver estaba siendo moderado al pedir cuatro huevos revueltos, cuatro rebanadas de pan francés con leche condensada, un panque de arándano y un batido de banana para beber, mi tío se encontraba leyendo una hoja frente a él mientras llevaba sus anteojos puestos, no los nesecitaba pero los usaba por costumbre, llevaba puesta una camisa de mangas largas color vino, unos pantaloncillos negros ajustados y unas botas, el cabello lo llevaba sujeto del flequillo con un par de pasadores puestos en equis, no me pasaban desapercibidas las miradas de todas las mujeres y algunos hombres del lugar, Oliver no era para menos, llevaba una camiseta negra sin mangas con estampado de calavera color blanco, unos jeans grises, unas botas negras, sus tatuajes resaltaban demasiado debido a que no llevaba ningún adorno extra, su cabello estaba hecho bolita y atado para dejarlo sin estorbos, yo en cambio me había puesto un pantalón de deporte negro de licra, una camiseta rosa con escote en v y unos tenis blancos de velcro, no llevaba adornos y me había maquillado poco, me sentía sorprendentemente bien, así mismo llevaba el cabello hecho bolita también y dejándolo andar libre por lo que quedaba en una coleta que llevaba hasta mis hombros.

-aquí dice que si el guardián carece de capacidad mental para ver correctamente por el protegido este puede solicitar y exigir que pongan como guardián a alguien competente dentro de la misma familia, en caso de que la familia no exista o desee hacerse cargo puede recurrir a un adoptante de confianza.-dijo antes de que dejara el documento sobre otros tantos sobre la mesa, Oliver se veía disgustado.

-¿quién creó esos tratados tan estúpidos y arbitrarios?.-preguntó en un ataque de sinceridad, Johan respiró hondo y exhaló mientras negaba con la cabeza.

-alguien machista y muy dañado de la cabeza seguramente.-dijo mi tío antes de dar un sorbo a su bebida y disponerse a comer otro bocado de sus panqueques, yo me encontraba disfrutando de los míos con soltura.-debemos llevar el caso ante la corte para que dictaminen la sentencia y puedan concederme la custodia completa tuya.-dicho eso por Johan mi amado Oliver nos miró concentrado.

-teniendo en cuenta que los jurados son un poco más abiertos hoy en día tenemos la ventaja de que cuenta como maltrato, tenemos evidencias sólidas de ese maltrato y de la inestabilidad emocional de la madre de Ana, estoy seguro de que nos darán gane en el caso.-dijo optimista mientras comía de su pan francés, Johan respiró hondo y volvió a negar.

-los jurados son de nuestra misma época, el dictamen para los vampiros de nuestra estirpe sigue siendo igual, se está luchando por que de modernice pero no se ha logrado por recato y costumbres arraigadas... La única forma en la que ordenarían que tu custodia sea mía sería si tu madre te lastima injustificadamente y tener pruebas de eso.-dijo antes de que Oliver se viera totalmente indignado con esos lineamientos, desgraciadamente era así aún a día de hoy.