"Cuando el dolor es insoportable, nos destruye; cuando no nos destruye, es que es soportable." -Marco Aurelio
AL DÍA SIGUIENTE...
*Narras Tu*
El miércoles transcurrió de forma normal. Grabamos la escena del principio, cuando Louis y yo nos conocíamos. El resto del dia, transcurrio tranquilo. No peleamos, es más, hicimos bromas y nos reimos, aunque seguía habiendo cierta tension entre Harry, Louis y yo. Pero pasaría con el tiempo.
Las dos comidas se basaron en pizza o hamburguesas que habíamos ido a comprar y el desayuno, en las sobras del día anterior con un poco de gaseosa. Hoy iríamos al supermercado y haríamos "la compra del mes".
Despues de otro caótico almuerzo (otra vez pizza), decidí que era hora de desempacar. No, no había desempacado aún. Solamente saque el pijama y una muda de ropa para usar hoy y el resto quedó ahi dentro, asi que era el momento de desempacar.
-Iré a desempacar -dije haciendo una seña hacia las habitaciones-
-¿No nos acompañarás? -pregunto Niall-
-No, compren comida y estaré bien. Adios.
Fui a mi habitación y me dirigí directamente a una de las maletas. Esta tenia la manija toda doblada y, sin acomodarla, intente agarrarla. La manija desacomodada junto con el peso de la maleta hicieron que mi muñeca se doblara toda, provocandome un dolor fuertisimo que me hizo gritar.
-¡AY! -grite y me arrodillé en el piso, sosteniendome la mano-
Hacía alrededor de cinco meses me había esguinzado la misma muñeca y el doctor me había dado una muñequera que servia para sujetarla, disminuyendo el dolor y permitiendo que la moviera con mas facilidad. Desde ese día, mi muñeca estaba mucho más propensa a doblarse o esguinzarse que antes.
Seguia sin saber cómo a mi madre se le había ocurrido guardarme esa muñequera en uno de los bolsillos de la maleta que estaba intentando levantar. De todos modos, intente buscarla con la otra mano, pero era necesaria para sostenerme la muñeca.
-¡Zayn! -se me ocurrio gritar entre lágrimas. Zayn era con el que mejor me llevaba, el me ayudaria. Si seguía en la casa- ¡Zayn! -volvi a gritar, pero no dio señales de vida-
Decidi levantarme e ir hasta alla, o por lo menos abrir la puerta para que mi voz fuera mas audible. Me levanté y camine hacia la puerta. Una vez frente a ella, debatí unos minutos entre abrirla o ir, asi que fui, a ver si ya se habían ido o si había quedado alguno de ellos.
Estaba caminando por el pasillo, aún con la mano sujetando mi muñeca, cuando escuché que el televisor del living se encendía. Había alguien, no me habían dejado abandonada. Caminé un poco mas y vi a Harry, que estaba sentado solo en el sofá, tomando cerveza y viendo la televisión.
-Harry, ¿puedes ayudarme? Me duele -dije en un susurro. Sentía todo el cuerpo caliente y los ojos hinchados, la presion por el piso y la cara demacrada, además de los nervios. Sí, asi me ponia cuando algo me dolía mucho-
-Si... esto... ya voy -dijo levantando una mano y bajándola-
-Ahora, por favor.
-No jodas, Blair.
-¡Maldita sea Harry, ¿quieres verme?! -grite y se me escaparon unas lágrimas de las punzadas de dolor-
-_____, el partido está por terminar
-Vete a la mierda, eres un inmaduro
Ni siquiera se si volteó a verme o me dijo algo, la ira me empujo hacia el baño. Con la mano libre me lavé la cara y despues de haberlo hecho, los ojos se me normalizaron. Seguía estando palida y con la cara demacrada y me sentía mareada por la presión baja, todo eso causado por el dolor de la estúpida muñeca. Busqué algunos calmantes, pero no había nada, asi que me tome un desinflamatorio. Y encima, se me cayó un frasco de pastillas al piso y se abrio. Lo dejé ahi, no podía hacerme cargo de algo más, sentía que iba a desmayarme.