Capítulo 36 : Sospechas.

960 24 0
                                    

“Vuestros hijos no son vuestros hijos: son los hijos y las hijas de las ansias de vida que siente la misma vida.” - Khalil Gibran

2 SEMANAS DESPUÉS… [10 de febrero]

*Narras Tu*

Todavía seguíamos peleados con Louis y Alex. Intercambiábamos alguna que otra palabra con Louis, pero solo eso y además, las grabaciones.

El viernes 1 de febrero, hacía exactamente nueve días, habíamos celebrado el cumpleaños de Harry en un club bastante conocido de Londres. Y yo, como es normal, me había emborrachado. Harry terminó llevándome en brazos al departamento mientras yo decía incoherencias e intentaba que se acostara conmigo. Y no solo para dormir. Al final, me tiró en la cama y cuando se fue a buscar un poco de agua para darme, yo ya estaba inconsciente. Todo este relato era según Harry, claro, yo no podría saber lo que sucedió realmente.

En la otra semana, había conseguido que Louis y Harry quisieran terminar las grabaciones, así ya podíamos dedicarnos a estudiar esos grandes libros para los exámenes de ingreso y ya tener lista la película. Anteayer terminamos las grabaciones, y anoche hicimos una cena de celebración a la que vinieron todos nuestros padres, Perrie, Eleanor y Danielle, pero ni rastros de Alex. Ni siquiera comprendía como habíamos entrado todos en la casa. Mejor así, no quería hacerla sentir mal a ella ni sentirme mal yo. Todo sería mejor si no nos hablábamos, mirábamos o convivíamos.

Hoy, alguien tendría que llevar la película al editor y Niall se ofreció, ya que quería visitar a Alex. Yo di un suspiro de alivio, porque si Harry quería ir yo tendría que acompañarlo y en estos momentos tengo problemas más importantes y grandes que resolver, luego les contaré un poco.

Después de desayunar, Niall anunció que se iba a Londres y todos fuimos a despedirlo. 

-¿Cuándo vuelves? -le pregunté-

-En un par de días, no me quedo mucho tiempo. ¿Hablaste con el editor?

-No, con el no. Hablé con mi papá y dijo que ya había hablado con él y que te espera.

-Bien.

-Cuida estas cintas con tu vida -le dijo Liam entregándole la caja de cartón con las cintas de la película en su interior- Nos costaron dos meses.

-No me digas -rio tomando la caja-

Subió la preciada caja en el auto de Louis, se despidió de cada uno de los chicos con un abrazo y de mí con un beso en la mejilla y se fue.

Ahora teníamos dos autos a nuestra disposición, uno era de Louis y el otro de Harry. Además, teníamos la moto de Zayn. Decidimos traer el otro auto y la moto para más comodidad, y por si cualquiera tenía que salir a hacer algo o a algún lugar y el auto no estaba. Por todas esas razones, teníamos tres vehículos a nuestra disposición y en este momento estaba agradecida por ello.

El problema que estoy enfrentando en este momento es el hecho de que creo que estoy embarazada. Tengo un retraso, y me estoy mareando fácilmente. Quizás sea el sol lo que me hace mal, ya que está demasiado fuerte y hace mucho calor y lo del retraso ya me ha pasado, pero no en circunstancias de tener un noviazgo. No es que sea un problema, pero no puedo vivir con la duda dentro de mí y necesito saber si estoy esperando un bebé de Harry o no. Es un poco loco, pero no sé como sentirme; si preocupada o feliz. Y tampoco hablé con Harry al respecto, por lo que no sé tampoco cómo se sentiría él. No quería decirle nada, prefería esperar a ver qué pasaba y, si estaba embarazada, se lo diría. Y, si no, todo quedaría en el olvido.

Tendría que ir a la farmacia a comprar el test, pero la casa estaba en el medio de la nada, y el próximo pueblo estaba a 65 kilómetros de ahí. Si no, tendría que ir a Londres y hubiera preferido ir con Niall, así que iría al pequeño pueblo y buscaría una farmacia.

-Harry, tengo… que ir a comprar unas cosas.

-¿A dónde? -pregunto con la ceja levantada-

-No sé, al pueblo que está a 65 kilómetros de aquí.

-¿Qué tienes que comprar?

-Un par de cosas que necesito, Harry.

-¿Quieres que te acompañe?

-No, no hace falta, voy sola.

-¿Segura? 

-Si Harry -dije algo irritada-

Si, también me enojaba fácilmente. “Eso se debe a las hormonas” leí en una página de internet. O quizás, estaba sacando todo el enojo que me había guardado durante esas semanas.

-Toma. Ve con cuidado -dijo dándome las llaves de su auto-

-Sí, Harold. Tengo 21, no 16 -me sonrió y me beso-

Me subí al auto y lo puse en marcha. Me saludó agitando la mano y yo me fui. 

Llegué en alrededor de media hora y pregunté a alguien por una farmacia. 

-Disculpe, señora, ¿hay alguna farmacia por aquí?

-Claro, hay una entrando al pueblo por la segunda calle pavimentada. La encontrarás fácilmente, no está muy lejos.

-Gracias -le sonreí y ella asintió-

Fui por donde me había indicado la señora y encontré la farmacia. Bajé del auto y le puse la alarma. Entré a la farmacia un poco incómoda. Nunca había ido a comprar un test de embarazo en mi vida y era bastante vergonzoso.

Estaba pagando cuando recordé que no llevaba campera para ocultarlo ni había traído una cartera.

-Mierda -susurre inaudiblemente mientras le entregaba el dinero a la cajera-

Cuando salí, me subí al auto y rebusque por si había dejado una campera o uno de mis bolsos ahí. Y, ¡bingo!, había una campera. Metí la bolsita bien adentro del bolsillo y lo cerré con el cierre, donde nadie pudiera verla. Luego, doblé la campera para que el bolsillo quedara debajo de las mangas y se pudiera ver menos.

Puse la campera en el asiento del co-piloto y me fui. 

En cuanto llegué a la casa, acomodé la campera en mi brazo y revisé que no se viera el bulto en el bolsillo. Luego, bajé del auto y entré a la casa. Harry estaba con Zayn viendo la televisión y se dio vuelta en cuanto entré. Dejé las llaves del auto en el esquinero junto al teléfono y cerré la puerta.

-Ya llegue 

Él me miró y se volvió a dar vuelta. Largué un suspiro de alivio. Nada de interrogatorios.

Fui a la habitación y tiré la campera en la cama. Me acosté un rato frotando mis sienes y pensando; ¿qué pasaría si yo llegara a estar embarazada? Yo tenía 21 y el 24 y no sería un buen momento para tener un bebé. Sin embargo, lo aceptaríamos. O yo, por lo menos. Pero no dejaba de ser un problema, ya que según todo el mundo, nosotros seríamos muy jóvenes para ser padres.

Me levanté de la cama y cerré la puerta de la habitación con llave. Desdoblé la campera, abrí el bolsillo y saqué el test.

En menos de media hora sabría si estaba embarazada o no.

-----------------------------------

Holaaaa! ¿creen que la rayis esta embarazada? averiguenlo en el siguiente capítulo muejejeje.

Summer Paradise *Harry y ___* Terminada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora