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Cada persona que estaba en la Marcha de las Mujeres ese 21 de enero tenía una historia, un motivo, un objetivo. Lauren se sentía realmente integrada y comprometida con esas protestas que iban desde el derecho a ser respetada como mujer, ya sea por su raza, por su condición social, religión, ocupación u orientación sexual hasta la lucha por el derecho a la vida y a decidir qué hacer con su propio cuerpo. Ella estaba completamente feliz de hacer algo por su país y ser parte de ese movimiento "my body, my choice" era uno de esos gritos que expresó con emoción y sentimiento. Ahí, no era Lauren, la cantante, no era la integrante de un grupo musical, realmente no importaba quién era en ese momento, porque ella era Una con todas esas mujeres. Había visto pasar junto a ella a filósofas, escritoras, profesionistas, mujeres trabajadoras, amas de casa, estudiantes, cantantes, actrices, activistas, etc. Ella era parte de esas personas. Escuchó historias conmovedoras, abrazó a mucha gente, apoyó, caminó por varias horas, gritó y siguió gritando para hacerse escuchar y mostrar su repudio al nuevo gobierno y sus ideas.  

 "Mi nombre es Ashley Judd, y yo soy una feminista". Así comenzaba su discurso en el escenario cerca de la Casa Blanca, la afamada actriz que se unió a la marcha y leyó un emotivo poema de protesta. Lauren la escuchaba con atención y admiración, a su lado se paró una joven, ella la miró detenidamente; era delgada, más o menos de su edad, su cabello rizado largo hasta los hombros estaba cortado de manera dispar, dejando una parte lateral de su cabeza rapada. Tenía tatuajes en ambos brazos. La chica volteó a mirarla y de inmediato Lauren la reconoció, sus rasgos físicos eran inconfundibles y tan parecidos a los de su famosa madre. Ambas se sonrieron. 

 —Nací en una familia que me enseñó a amar y a respetar mis raíces.   —Comenzó a hablar la joven en perfecto español, pero con el característico acento cubano— . Mis abuelos y mis padres fueron los primeros inmigrantes cubanos que llegaron a Miami una vez que Fidel Casto asumió el poder. Mi abuelo formó parte del grupo que trató de liberar a su país de ese gobierno opresor; mi madre lleva toda su vida deseando cantar en una Cuba libre. ¿Y yo? Yo abracé mis raíces y forje sobre ellas un carácter que me llevó a buscar y encontrar mi propia voz. Todos somos iguales Lauren, pero a la vez tan distintos y esas diferencias son las que al final de cuentas nos unen y hoy más que nunca debemos estar unidos. 

Lauren la escuchó y no pudo evitar derramar un par de lágrimas.   —Eso es muy hermoso, Emily.

—¿Qué te motiva estar aquí?

—Al igual que tú, también me siento orgullosa de mis raíces y de lo que soy. Sé lo que mis padres han luchado y trabajado para darnos a mis hermanos y a mi una educación. Mucha gente debe tener derecho a hacerlo y salir adelante.  No quiero un gobierno fascista, ya hemos avanzado mucho como para retroceder.  

—¿Quieres un consejo? Libérate de lo que te detiene personal y profesionalmente también. Creo que puedes hacer grandes cosas. 

 —Espero lograrlo pronto. 

 —Cuando lo hagas, búscame, me encantaría que hiciéramos un dueto, sería genial. Estoy por presentar mi primer álbum, estaré el 2 de febrero en el Festival de Miami. Ojalá puedas asistir. 

—Me encantaría. Espero no tener ningún compromiso con el grupo ese día.  

—En verdad no sé que hace alguien con tu talento en un grupo así. Encuentra tu propia voz y tu propio estilo. Yo lo logré y créeme, no es fácil hacerlo cuando la gente espera que sigas un legado musical.

—Puedo imaginarlo, debió ser muy complicado. De verdad te agradezco que te interese colaborar conmigo. 

—Mi disquera esta abierta a quienes quieran experarse libremente con su propio estilo musical. No lo olvides. Dame tu número para estar en contacto. 

EL FINAL DE TODO (Camren Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora