EL FINAL DE TODO (Camren Fanfic)

12 (Parte II)

Camila y Lauren caminaron hacia la cabaña, pasaba de la media noche y el clima era sumanente frío. Ambas llevaban gruesas chamarras. En el camino continuaron con su conversación.

  —Este es un hermoso lugar.  — Comentó Camila

 — He pensado que sería bueno vivir aquí, algún día. El tiempo parece detenerse, podía pasar horas frente a la chimenea simplemente leyendo un buen libro sin pensar en lo que sucedía afuera.

  —Eso parece un plan perfecto para una persona de ochenta años.  —Bromeó Camila. Lauren se río.

 —Sólo espero que siga estando así de hermoso dentro de 60 años. ¿A tí te gusta?

 — Definitivamente. 

  — Conserva ese pensamiento por 60 años... o más.  — Camila se detuvo ante la insinuación de Lauren. Ella sonrió de manera traviesa—.  Si te quedas allí parada vas a congelarte. Estamos por llegar.

La pintoresca cabaña que rentó Lauren se divisó en el camino, ella se adelantó unos pasos para abrir la puerta. Camila se detuvo detrás de ella. 

  — Tienes buen gusto.  —Dijo maravillada por la fachada del lugar. Lauren la miró de arriba a abajo descaradamente. 

 — Definitivamente tengo buen gusto. 

Antes de que Camila pudiera reaccionar, Lauren abrió la puerta y le hizo una seña para que entrara primero. Camila sonrió y entró a la casa sintiendo de inmediato un ambiente cálido, las luces estaban encendidas. Se quitó la chamarra y la colgó en un perchero de la entrada. Lauren hizo lo mismo luego de cerrar la puerta. 

  — ¡Vaya! Es... hermosa.  — Camila contempló el lugar que era bastante cómodo y acogedor.

 — La chimenea está por acá. Ésta es la sala. Allá está la cocina, el comedor y las habitaciones están al fondo, son tres. Hay una estancia con televisión y una sala de juegos de aquél lado. Sam y Jeremy llegarán mañana para la presentación en el Festival. Tu... ¿Vas a quedarte? Uhmm al Festival... quiero decir.

  — Tal vez. 

 — Y... ¿esta noche?

  — Prometiste que me darías la habitación más grande. No podría rechazar eso.

 — Olvidé decirte que me estoy quedando en esa habitación

  — Ya te dije que no duermo con nadie en la primera cita. 

 —No tuvimos una cita.

  — Pero a penas nos estamos conociendo ¿Recuerdas? 

Lauren sonrió y se acercó a Camila. —Me gusta esto. No hay nada, ni nadie en medio de nosotras, no hay un debes hacer esto y debes callar lo otro. Nadie tiene que decirnos lo que tenemos que hacer. Nadie controla nuestras vidas, nuestros pensamientos. En este momento, nada real puede ser amenazado y nada irreal existe. En este momento sólo somos Camila y Lauren peligrosamente solas en una cabaña lejos de la efímera fama, los managers que controlan cada uno de nuestros movimientos, los acosadores paparazzis y los locos fans. Estamos aquí, olvidando el pasado y empezando de nuevo. Levantándonos después de caer.

Camila la miró a los ojos, el dolor de lo que había sucedido días antes se hizo presente. Quería respuestas, pero arruinaría todo el momento maravilloso que habían logrado en las últimas horas y quería seguir disfrutando de esa perfección. Estaba con ella ahora, viendo en sus ojos y en sus palabras cuánto la amaba. 

  — Lauren 

  — ¿Sí?

 — Tú...