My Girl-Boy. [Español]

Capítulo 20: ¿Por qué me haces esto, Matt?

[Sin editar]

Cierro la puerta en cuando veo su auto alejarse por la calle. Sonrío, inconcientemente y camino a pasos lentos hacia mi habitación.

Afortunadamente ni mamá, ni Leticia le hicieron preguntas tan incómodas a Matthew. Sólo hablamos de la universidad, y de nuestro rendimiento en ella. Se hizo muy corto el tiempo con su presencia, casi había olvidado que debía irse a estudiar.

Ordeno algunas de la universidad antes de ponerme mi pijama para acostarme. Ya es un poco tarde y me encuentro un tanto cansada.
Unos golpes en la puerta me hacen fruncir el ceño ligeramente, pero luego sonrío al ver quien está detrás de ella.

—¿Estás ocupada? —pregunta Leticia, con la cabeza asomada en el umbral.

—No, pasa —le digo. Ella se sienta conmigo en la cama, y se queda observándome unos instantes para luego hablar—. ¿Y bien? ¿Quién es ese chico?

—Un amigo de la universidad, ya te lo dije —giro mis ojos, y suelto un suspiro.

—Qué es para ti, Melisa.

—Un amigo.

—No lo es. —suelto un gruñido, y me paro frente a ella con los brazos cruzado.

—¿Qué quieres que te diga?

—La verdad —suelta con tranquilidad.

A veces odio que Leticia tenga una mirada que es como si estuviera leyendo tu mente.

—Es... —hago una pequeña pausa, para tragar— complicado.

—¿Por qué?

— Tú lo sabes —agacho mi cabeza. Comienzo a sentirme incómoda.

—No —dice, firmemente—. Lo único que sé, es que toda tu vida has rechazado a todo el mundo por lo que te pasó. Y puedo comprender que es difícil, pero creo que estás muy grande para enfrentar la realidad.

Siento que mis ojos se cubren de lágrimas. A veces sus palabras tan duras duelen, pero siempre ha dolido la verdad.

—Te he apoyado siempre, Melisa. Oculté todo lo que te pasó ese día, hasta con la policía. ¿Sabes cuál sería mi única paga ante todo eso? —niego con la cabeza, sin mirar su rostro—. Verte feliz, que cumplas tus sueños. ¿A qué le tienes miedo?

—Tengo miedo a que me vuelvan a lastimar —le digo, casi susurro.

Ambas nos quedamos en silencio unos segundos, tanto, que solo puedo oír mi respiración.

—¿Piensas rechazar a las personas por el resto de tu vida? —muerdo mi labio inferior, nerviosa. No sé que decir—. Sé que es difícil, hija. Pero no puedes estar así siempre, eres una chica hermosa e inteligente. Tal vez lo que necesitas es una fortaleza, y solo tú puedes encontrarla.

Me quedo en silencio un par de segundos más para pensar. Cuando lo hago, alzo la vista para mirar sus ojos.

—Creo que Matt me gusta —reconozco, por primera vez.

Ella me sonríe cálidamente. Yo suelto un suspiro sintiéndome de alguna manera, liberada.

—Cuéntame de él —apoya su cabeza sobre sus manos y me mira con atención. Yo suelto una risita y seco algunas lágrimas de mis ojos.

—Él es diferente a otros chicos. No sé lo que tiene, pero me gusta —mojo mis labios y aclaro mi garganta—. No te digo que estoy enamorada, pero si me atrae.

—¿Y crees que él siente algo por ti?

— No —digo, de inmediato—. Él está enamorado de su ex novia, estoy segura.