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Kendra y Loreto estaban pasando por la carretera de Fremont cantando como siempre lo hacían cuando pasaban por ahí y cuando se sentía felices al menos por unos minutos.

-🎵Whenever wherever we're meant to be together I'll be there and you'll be near and that's the deal my dear. Thereover hereunder you'll never have to wonder we can always play by ear but that's the deal my dear🎵

Mientras tanto canto, Loreto apagó la radio para contestar la llamada de Liliana.

-¿Querida?

-Dónde estas.

-Eh...yendo al..shopping center.

-¿A qué?

-A comprar...un nuevo mp3, tú dónde estas.

-Estoy por la carretera y acabo de ver el auto de Kendra en mi delante.

-¿¡Qué?! -Gritó.

-Qué pasó. -Susurró Kendra.

Loreto supuso que el momento había llegado, pero por qué, se preguntó, aún no estaba listo. Las cosas que sucedían inesperadamente lo ponían nervioso.

-Kendra, ve más rápido. -Le susurró.

-Lo voy a hacer. -Dijo Liliana en la llamada. -Es ahora o nunca.

-¡No, no, no! ¡Espera, espera! ¿¡Qué harás?!

Liliana cortó la llamada. Kendra aún no entendía que ocurría pero pensó en que sería algo muy malo por la reacción de trauma de su primo.

-¡Mierda!

-Qué pasó. -Preguntó Kendra en un tono relajado.

-Es Liliana, sospecho lo que va a hacer.

Loreto volteó y vio que el auto de Liliana se acercaba. El chico entró en pánico mientras Kendra seguía conduciendo a toda velocidad sin saber por qué.

-¡Acelera todo lo que puedas!

-Pero, qué hará.

-Solo avanza.

Kendra lo obedeció, su hermana estaba a poca distancia. Kendra estaba tan asustada y confundida que a veces miraba a Loreto para que este le explique.

-¡Avanza!

-¡Eso hago!

Loreto aún no sabía cómo empezar el plan. Pero tenía que intentarlo, se persignó como si fuera un creyente. No hay mejor resultado que los que derivan de una acción bien planificada, pero esto era una emergencia...y quién sabe, se preguntó, tal vez funcione.

-Suelta el timón, Kendra.

-¿Qué?

Kendra se asustó de oír tremenda y mortal orden. Si lo soltaba, el auto caería al acantilado. De pronto, Loreto sacó un encendedor de su bolso, provocando más miedo en su prima.

-¡¿Qué vas a hacer?!

-Voy a prender el auto, cuando lo lance, saltamos hacia la izquierda, oíste?

-¡Por qué quieres hacer esto!

-¡Porque Liliana te matará si no lo hacemos!

Loreto colocó el encendedor en el asiento de atrás y al ver que este se prendió en llamas, Loreto abrió la puerta de su asiento. Kendra con todo el temor encima, soltó el timón como se lo había dicho. Pensó en que morirían, el auto ya se estaba yendo solo hacia un lado.

El primo tomó la mano de Kendra y estos salieron del auto de un salto. El auto avanzó y Liliana llegó a alcanzarlo. La chica sintió que su felicidad estuvo a punto de llegar.

Kendra ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora