Cuando mencionó el infierno, mi cabeza se dispersó un momento antes de perderme en la inconsciencia.No sé como llegué al montón de paja que era mi cama - supongo que Euphemia me arrastró hasta allí - pero le estuve dando vueltas toda la noche.
Infierno. ¿ Qué es lo que uno podría esperar de él ? Dolor, sufrimiento, soledad... pero el infierno, al menos el tipo de infierno al que él se refería, no me asustaba en absoluto. Yo ya tenía mucho de eso.
Pero lo que desde luego no me esperaba, fue cómo cambió mi vida aquel día.
Fui zarandeada sin miramientos, y mis ojos se abrieron de par en par.
- ¿ Qué pasa ? - pregunté adormecida.
- El amo- Euphemia respondió con sequedad- os vais.
- ¿ Irnos ? - inquirí confundida - ¿ A dónde ?
Ella se cruzó de brazos y me dió un sopapo en la cabeza.
- ¿ Tengo cara de saberlo ? Anda, ¡ ve y no pierdas más tiempo !
Así lo hice. Me acomodé el harapo que usaba por ropa y anudé mi cabello con una vieja cinta.
Salí de la hacienda, y ya fuera, me esperaba él.
- ¿ A dónde vamos, amo ?- me atreví a preguntar.
- Ya lo verás - respondió con una sonrisa que no me gustó nada - Démonos prisa, no queda mucho para que empiece el recuento.
Comenzamos a andar.
Solo entonces, cuando dí la primera gran zancada, recordé la paliza que la noche anterior me había dado.
- ¡ Acelera, mocosa !
Apreté los dientes y acomodé mi paso para caminar dos por detrás del suyo. Si no pensaba en el dolor que estaba sintiendo, quizás desaparecería.
Pasó un buen rato, y el dolor no solo persistió, sino que se acrecentó. Las heridas abiertas se raspaban contra la tela áspera y escocía.
El amo me empujó sin miramientos hacia un tenderete.
- Vengo a venderla.
Esas tres palabras fueron como música para mis oídos.
Lo miré con los ojos muy abiertos.
¿ Venderme ? ¿ Dejar de ser su exclava ? ¡ No podría haber imaginado regalo mejor !
- No te pongas tan contenta, niña - sonrió, una de esas sonrisas de maldad que tanto me asustaban - procuraré venderte a la peor persona, para que sufras por tus pecados .
Mis pecados. Como si yo hubiera hecho gran cosa. Como si pudiera haber alguien peor que él.
Sonreí mientras que examinaban mi salud a través de mis dientes. Quizás éste sería un buen día.
Me agarraron del brazo, y me colocaron junto a un grupo de personas con un pigmento rojo en la vestimenta.
Recorrí al grupo con la mirada. Sin duda había ido a parar al mejor grupo de esclavos. Normal, pues estaba sana, en buena forma y era joven todavía.
Nos subieron a todos, a la fuerza o no, a una tarima.
Un hombre viejo abrió la jornada del día, presentándonos.Escuché mi propio nombre, seguido de mi edad y mis cualidades domésticas, así como el de otros y otras de mi rango.
Después de aquello, los interesados subieron al estrado a inspeccionarnos libremente.
Uno tras otro todos pasaron frente a mi. Algunos me miraban con atención, otros no.
![](https://img.wattpad.com/cover/101244068-288-k960191.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Serva
Ficción históricaMe creen débil, pero soy fuerte. Soy apenas una niña, pero a la vez, toda una mujer. Soy sierva, pero nací libre. (Novela ambientada en la Antigua Roma) #1 en Novela Histórica el 18/02/19