Postre

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Se mordió el labio inferior por tercera ocasión, sus manos apretujaban el cojín encima de su estómago, capaz de cubrir incluso parte de su pelvis. Su pierna rebotaba contra el suelo en señal de desesperación. La televisión, encendida, vista solo por uno de ese par.

Exhaló aire caliente cuando vio como un poquito resbalaba por la comisura de su boca.

La lengua repasaba el contorno metálico de la cuchara, su curvatura, su filo, la engullía hasta dejarla limpia de ese postre.

Sasuke estaba un poco enfermo ahora. Tenía un fuerte dolor en la boca del estómago, así que le recomendaron comer yogur natural para recubrir todo riesgo de ulceras. Lleva semanas así...

... torturándolo.

Y entonces el pantalón le aprieta. Baja un poco más el cojín mientras intenta regresar su atención a la pantalla, es un documental, es su culpa que no preste atención...

¡¿A quién engaña?! ¡Bien podría estar pasando unas modelos sexys con ramen y él estaría como ahora! Justo así, babeando al verlo relamerse los labios luego de meter más y más yogur. Sasuke es tan cruel... porque tiene sexo con él pero rara vez, muy rara vez, le da un poco de cariño personalizado a la Naruconda (como le gusta llamarle).

Traga saliva cuando Sasuke, por estar observando una pelea entre leones, deja la cuchara a centímetros de su rostro y el yogur cae en hilillo y le mancha parte de su boca y mejilla. No le importa y con suma paciencia se lo quita con la lengua y el dedo.

¡Ya no puede más!

¡Que Dios le proteja!

El cojín no cae al suelo, lo necesita. Se pone frente a él, sube una de sus rodillas al poco espacio que queda en el sofá donde Sasuke está recostado, luego le arrebata el botecillo y la cuchara. Lo escucha gruñir molesto pero no le importa, si se detiene, morirá, morirá en serio.

-Ya deja de comer eso... -su voz está transformada, por si Sasuke no lo notó con su ansiedad, ese tono bajo, como rugido, le hace caer en la idea. Se deja levantar la cabeza y lo ve poner el cojin para que ésta quede más levantada. Escucha el cierre bajar de una sola vez y entonces saca el pene, erecto ya, lo ve acariciar su extensión y poco a poco, gotea. –Este yogur sabe más rico.

Sasuke sonríe de lado y abre la boca, deseoso de probarlo. 

Historias cortas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora