Barely Breathing [FINCHEL]

Capítulo 62

#NOBREATHINGDAY

POV FINN

Pensar que el regresar a aquel lugar después de tanto tiempo seria en medio de todas las porquerías que estaban ocurriendo últimamente, me era difícil creer que mi madre haya estado involucrada con Figgings y que haya tenido que pagar tal precio. Los recuerdos de mi niñez eran tan solo unos pocos fragmentos de la verdadera realidad aunque dándole vueltas al asunto una madre solo revela sus secretos a sus hijos en una edad más avanzada, solo que su oportunidad de hacer lo le fue arrebatada y junto a ella todas sus verdades cayeron bajo tierra.

Las puertas del cementerio aunque siempre abiertas no daban el sentimiento de ser bienvenido, tal vez porque es el último lugar al que quieres llegar. Un sitio lúgubre lleno de pérdidas, lamentos y malos olores no era un lugar para nadie, pero sin embargo aquí estábamos.

―Finn, ¿seguro que estás listo? Podemos irnos si es lo que quieres. ―Preguntó Rachel entrelazando nuestras manos. Agradecía que ella accediera a venir conmigo.

―Estoy bien Rachel, vamos. ―Deposité un suave beso en su cabeza y avanzamos entre las áreas del cementerio.

Sabía que estaba cerca, no solo porque fuera incapaz de olvidar el sitio donde enterré a mi madre, sino por las tonalidades marchitas de la hierba a medida que avanzábamos.

Eliza Stone

Aun se podía leer su nombre entre la maleza que había crecido abundantemente sobre su tumba, no me moleste en removerla. Sabía que eventualmente iba a volver y darle un sitio de descanso eterno decente, era una promesa.

―Hola mamá ―Saludé sintiéndome algo extraño, no sabía si existía tal cosa como el paraíso pero me gustaba pensar que si, y que en algún lugar allí arriba ella estaría escuchándome. ―Sé que no he vuelto desde que llegaste aquí, pero te aseguro que no he pasado un día sin pensar en ti y en lo que podrían haber sido nuestras vidas.

Solté un ligero suspiro, era un sentimiento tan extraño como si todas mis emociones simplemente fluyeran todas juntas.

―Ella es Rachel, mamá. ―Tomé su mano a lo que ella simplemente sonrió ante el tacto. ―Es la mujer que amo y quien ha estado conmigo todo este tiempo. Incluso me recuerda un poco a ti.

―Opino lo mismo. ―Esa voz era una la cual no esperaba escuchar, tampoco la deseaba escuchar, simplemente me causaba una irá profunda. ―Lamento interrumpir Finn Hudson... O Finn Stone, ese era tu nombre antes de que adoptaran de igual manera.

―Figgings... ―Volteé para corroborar que efectivamente se encontraba ahí, parado con una sonrisa que oreja a oreja. Rachel empezaba a ponerse nerviosa, lo podía notar por la fuerza con que sostenía mi mano. ―¿Qué hace aquí?

―Como ya has de saber, tu madre y yo éramos muy... cercanos. Asumo que la carta que encontraste con tus amiguitos en mi oficina te ayudó a comprender. ―Abrí los ojos como platos al saber que conocía el hecho de que estuvimos allí. ―Las cámaras de seguridad son muy útiles, como ex-oficial debería saberlo. Y si, ex-oficial, ya no requiero de sus servicios.

A pesar de que el bastardo me haya despedido aun me sentía intranquilo.

―Usted asesinó a mi padre, por eso lo dejó.

―Lamentablemente.

Lo siguiente era tan solo una especulación que temía comprobar, sin embargo tomé coraje para continuar.

―Y la mató...

―No lo diría así, incluso ni siquiera fui yo. El viejo Abrams se encargó de aquello antes de cederle el sitio a su hijo, supongo que no la quería dejar ir fácilmente cuando amenazó con dejar el bar. Cuestiones de orgullo, aun así me alegra por ello digamos que solo la envió con su estúpido amor verdadero. Me amaba a mí, lo amaba a él. Era una puta. Como aquella chica que te acompaña, con el tiempo no tardará en encontrar a otro que la rellene a su gusto.