Barely Breathing [FINCHEL]

Capítulo 4

POV FINN

Nunca había imaginado que los interrogatorios además de confusos, fueran irritantes. Nunca hay una sola versión de los hechos pero aún así tenia que seguir con mi investigación.
Decidí hacerla fuera de las 4 paredes del lugar para que fuera más casual de forma que no exista alguna presión. Me dirigí al bar a tomar una copa o en realidad a intentar tener una buena charla con el barman y obtener cualquier tipo de información. 

—Sírveme lo mejor que tengas —Me dirigí casualmente al chico que estaba tras la barra acomodando todo tipo de bebidas, mi llamado hizo que se sobresaltara un poco. —Disculpa, no pretendía asustarte.

—Oh no es problema, sale un buen trago enseguida. —Nada más por su voz podía distinguir a un chico homosexual —Aquí esta.

–Gracias. Por cierto, ¿eres Kurt Hummel? —Asintió un poco confundido por tener el conocimiento de su nombre. —Soy el oficial Hudson, no te preocupes solo quiero hacerte unas pocas preguntas. 

—Claro, supongo es lo usual luego de un acontecimiento tan espantoso. —Bajó la mirada, parecía triste y nervioso al mismo tiempo.

—Atiendes aquí todos los días, ¿no? Esperaba que me pudieras decir si has notado algo extraño entre trabajadores o clientes, ya sabes, alguien que se haya puesto agresivo o querido sobrepasar con la víctima.

—Anoche no hubo nada que no pase con regularidad. Siempre hay alguien que bebe de más, cosa que se encargan los de seguridad sacándolos de aquí por las leyes estrictas que hay en cuanto el comportamiento.

—Muy bien y dime, ¿sabes algo de Noah Puckerman? Cualquier detalle es útil.

—Es un cliente regular, viene a parar aquí cerca de 5 veces por semana. Normalmente pasa tiempo con Santana debido a que es su favorita, ¿Acaso es sospechoso?

Parece que la coartada de Santana es sólida, aún así debo confirmar con Puckerman para descartar dudas.

—Me temo que no puedo darte detalle pero te haré sabe si hablamos algo.

—¡Hummel!  Deberías estar trabajando. ¿Quién es él? ¿Tú novio? Marica. —Gritó acercándose un hombre vestido de negro, tenía unos rizos rebeldes y una barba que le daba un aspecto rudo. Por  su uniforme y el hecho de que lo había visto en la entrada, supuse que era el encargado de seguridad.

Hummel se enderezó de golpe sin apartar la mirada de aquel hombre, parecía triste pero sus ojos transmitían algo más.

—Oficial Hudson —Me adelanté saludando y mostrando mi placa. —Solo le hacía unas preguntas sobre lo ocurrido.

—Ya veo, me informaron que un oficial merodeaba por aquí y lo entiendo —Mantuvo firme la mirada. Miró de mí hacia el chico ojiazul. —en cuanto a ti, no quiero saber que te estés tomando un descanso fuera de orden, no me interesan que tus manos de porcelana se agrieten.

—Si Blaine, entiendo y no volverá a pasar —Comentó rápidamente el ojiazul para satisfacer al moreno —Espero haber sido de mucha ayuda oficial Hudson pero ahora debo trabajar.

—Bien, gracias por tu tiempo.

No hay ningún avance o alguna información relevante respecto algún otro sospechoso. Es como si el culpable simplemente se hubiera esfumado sin dejar rastro alguno, sea lo que sea no se trata de cualquier criminal novato. Solo resta hablar con el dueño del lugar para establecer asuntos legales y nos permita vigilancia en el sitio para prever que no ocurra de nuevo.

Me dirigí al despacho de Artie Abrams, dentro se encontraba un fino escritorio de madera rodeado de bellísimas pinturas y una que otra planta de interiores. El Sr. Abrams se encontraba allí, nunca me imagine en las condiciones que tendría: era un hombre vestido de un fino traje totalmente impecable pero lo único que veían mis ojos era la silla de ruedas en que reposaban sus evidentes e inútiles piernas.

—Sr. Abrams, me gustaría que habláramos un poco de las condiciones a la que nos enfrentamos. —Me dirigí a el lo más formalmente posible alejando mi mirada de la silla.

—Sr. Abrams era mi padre, por favor, dígame Artie. No es necesario ser tan rígido respecto a mi condición.

—Esta bien, Artie, como verás nos encontramos en una investigación. No puedo dar muchos detalles pero debido al estado en que fue encontrada la víctima podría decirse que fue un asesinato premeditado, por lo que es muy probable que se trate de un asesino serial. —Hice una pausa para analizar su mirada ahora seria. —Debido a eso creo que necesitamos vigilancia y acceso a todo el establecimiento incluyendo al personal.

—Me temo que tendré que meditar esto, no puedo simplemente permitirme que la presencia de oficiales de policía influya o afecte la comodidad de los clientes o mi personal —Comentó instantáneamente algo nervioso, intentaba tomar ese nerviosismo como algo simple e inofensivo.

—Pero tampoco podemos permitirnos que el caso se repita, aquello no sólo afectaría la comodidad de sus clientes también afectaría la estabilidad del bar y por consiguiente clausurarlo. ¿Algo que ocultar, Artie? —Le dije con voz amenazante para dar un incentivo.

—En absoluto. —Respondió tajante. —Usted tiene toda la razón, puede traer a cuantos hombres quiera siempre y cuando indaguen solo lo necesario, no queremos que ciertas "cosas" disturben a mis clientes. Si me disculpa me gustaría que abandonara mi despacho, tengo cosas que hacer. ¡Anderson! —El moreno de antes respondió inmediatamente a su llamado. —Por favor dirija al Oficial Hudson a la salida.

El moreno instantáneamente me escoltó a la salida. No sólo no había llegado a nada sino que además una duda más se adjunto a las demás... ¿Qué es lo que está tratando de ocultar este bar?