Capítulo 59

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#NOBREATHINGDAY

*Narrado en tercera persona*

Al llamado que había dado la policía a través de la prensa, la gente y los murmullos no habían tardado en verse presentes. Por un lado, los trabajadores del bar se encontraban absortos con tanto movimiento que sucedió sin que ellos se dieran cuenta y por el otro, los cuatro chicos más unidos a la persona a la cual le costó la vida estaban destrozados.

Rachel Berry y Kurt Hummel había llegado corriendo, sin embargo nada podía salvar a Yusia de lo que había pasado. Finn no soltaba el brazo de su novia mientras que Blaine acariciaba la espalda del ojiazul para hacerlo calmarse.

―Nada de esto habría pasado si nos hubiéramos esperado un rato más. ―Sollozó la morena.

Nadie tuvo el valor de contestarle, ni siquiera el más alto sabiendo lo que sabe desde hace tiempo.

―Yusia podía ser todo lo que quieras, pero eso no significaba que era mala. Nadie tenía derecho a matarla y huir en el proceso. ―Kurt frunció el ceño y se alejó un poco de su novio en el momento que vio a Evans salir del bar.

―Chicos, me temo que el bar quedará cerrado hasta nuevo aviso. O quizá, nunca podrá volver a ser abierto.

― ¡El bar nos importa un carajo! ―Gritó Rachel. ― ¿Tienes alguna explicación a la muerte de Yusia? ¿Por fin sabes quién está detrás de todo esto?

Sam miró fijamente hacia Finn, quien con la mano ceñida en la cintura de Rachel trataba de tranquilizarla para que pudiera continuar con su plática.

―Contesta, Evans. ¿Tienes idea de quién ha hecho todo esto? Yusia no puede estar muerta porque sí.

―Sí, sé quién está detrás de todo esto. ―El ojimiel abrió estaba en shock mientras que Kurt derramaba una que otra lágrima. ―Gracias a Ryder y a tú hermana lo hemos logrado.

―Sam, no. ―Dijo Finn.

― ¿Qué tiene que ver mi hermana en todo esto? ―Preguntó Rachel confundida.

―Créeme que no es nada por lo que te tengas que preocupar, Rachel. Lo importante aquí es que sabemos quién es y, me temó que todo esto pasó porque Yusia también tenía consciente quién es la persona que ha causado todo este problema. Por desgracia, hemos llegado tarde.

―Vaya, sí que los oficiales son de buena ayuda. ―Dijo Kurt sarcásticamente. ―No entiendo cómo no han actuado con mayor rapidez.

― ¡El trabajo de un oficial no es fácil! ¿Crees que era mi intención que alguien más muriera en este estúpido bar? ―El rubio gritó y se puso frente al ojiazul de manera retadora haciendo que Anderson y Finn lo detuvieran para que no iniciara un desastre en su propia carrera. ―Estoy terminando de entender cómo es posible que haya podido mentir por tanto tiempo, ¿creen que para ustedes va a ser fácil aceptar quién es el culpable?

McCarthy llegó al lado de su jefe en turno y le indicó que el cuerpo de la víctima estaba a nada de subirse a la camioneta para ser llevada a manos de los forenses para la autopsia y de esa manera descubrir todo tipo de dato que podrían ser usados, aunque para el rubio, nada tenía más sentido pues sabía a la perfección todo lo que debían saber.

― ¿Necesitan algo del bar? Estamos a nada de iniciar el proceso.

―No, no, no. ―Dijo Rachel tomando su brazo. ―No intentes cambiarnos de tema, Evans. Dinos lo que queremos saber, no nos interesa si no puedes hablar y mucho menos si no es algo seguro. Dilo, ahora mismo.

Rachel estaba más furiosa que otras veces y tal vez se debía a la revelación que hizo acerca de Marley. Sam estaba entre la espada y la pared sin importar que no fuera un tema del cual necesitara privacidad, por lo que con voz segura dijo:

―Artie Abrams. Su discapacidad realmente es fingida y ahora está más que claro pues escapó fácilmente de la justicia.

Los cuatro amigos estaban en shock, ninguno podía mencionar palabra por lo que no pudieron hacer más que apoyarse en los brazos de su pareja para recibir un poco de apoyo. Esto era emocionalmente devastador: habían perdido una cercana amiga por culpa de una persona a la cual nunca habrían creído capaz por su ahora fingida discapacidad.

―Les aseguro que lo encontraremos. ―Prometió McCarthy para incluirse un poco en la conversación e intentar relajar el ambiente. Aunque fue un paso en falso, pues lágrimas de parte de Rachel volvieron a salir.

Sam ya no sabía que más hacer, por una parte creía que el ojiazul tenía derecho a enojarse porque siendo el encargado del caso tenía mucho deber el cual debía haber cumplido, aunque por otra parte nadie imaginó lo que había sido capaz aquel hombre con tal de no quedar expuesto.

―Tranquila, amor. Todo estará bien. ―Le susurró Finn en el oído a Rachel y comenzó a dar más masajes a su espalda para que el llanto lograra parara. ―Te prometo que este será el final.

― ¿Cómo puedes estar tan seguro de eso? ―Preguntó Rachel levantando su cristalizada vista hacia su novio. ―Creíamos que ya había acabado con Puckerman tras las rejas, ¿y ahora esto?

―Rachel tiene razón. ―Kurt se acercó a ella y le tomó el brazo. ―Si lo que debemos hacer para que todo esto acabe es encontrar a Artie pasaré el mayor tiempo posible en su busca. Y créeme que ahora ya es mucho tiempo sin trabajo alguno.

―Kurt, ese es trabajo de la policía. ―Dijo Blaine. ―No tienes el conocimiento para ello.

― ¡Me vale! No permitiré que otra vida se pierda.

Finn estaba tan concentrado abrazando a su novia que no se había dado cuenta de las palabras que había dicho el ojiazul. Esta podía ser la oportunidad que estaba esperando para iniciar un plan contra la persona que podría estar relacionada con el escape de Artie tal y como había amenazado en sus palabras esa misma tarde.

―Creo saber por dónde podemos empezar. ―Dijo en voz alta haciendo que los tres pares de ojos estuvieran en él. ―Créanme, esto está a nada de llegar al fin.

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Por otro lado con fuerza y determinación, Schuester había conseguido los permisos necesarios para expandir la investigación y clausurar el bar incluso sin la ayuda de Figgings. Con Abrams suelto era más que obvio que solo su unidad de policías no sería suficiente, alguien con la astucia de aquel hombre iría lo más lejos de sus crímenes de lo que alguien puede imaginar. Sin embargo no podía dejar cabos sueltos, mientras sus oficiales se encargaban de los recientes asuntos en el bar el rizado echaría mano en hablar con una victima sobreviviente: Santana Lopez. 

Llevaba su típica vestimenta formal acompañada de un pequeño presente: un globo de "mejórate pronto" para romper el hielo y entrar en detalle más rápido. Pasando entre los grandes pasillos junto al común aroma que se les atribuyen a los hospitales, una vez dio con la habitación fue retenido por el doctor a cargo. 

―Dr...―Con una rápida mirada hacia su bata continuó con sus palabras―Smythe.

―El mismo, ¿En que puedo ayudarle oficial?―¿Como había sabido el hombre que el rizado era un oficial?―Puedo ver su placa desde aquí. 

―Bien, solo quisiera hacerle unas cuantas preguntas a la señorita Lopez 

―Me temo que no será sencillo, la paciente presenta serias lesiones en su cuello y sus cuerdas vocales fueron lastimadas en el proceso por lo que actualmente no será capaz de emitir palabra alguna hasta que no sane del todo y asista a terapias. 

"Perfecto"  pensó irónicamente el rizado, no solo había escapado sino que le estaba haciendo aun mas difícil el averiguar algo más. Sin la prueba de ADN hubiera sido imposible el obtener su identidad sin el habla de Lopez, pero Schuester tenia algo seguro: Abrams acabaría tras las rejas pronto.

Barely Breathing [FINCHEL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora