Poco más tarde, por aquellas blancas puertas ingresaron Sunday y James. Ambos venían con una sonrisa. Totalmente entusiasmados, probablemente por el cumpleaños de Alexis.
— Traíamos pastel, pero no dejaron que entráramos con él —, fue lo primero que enunció la rubia, haciendo un puchero mientras se acercaba a nosotros eufórica. — Feliz cumpleaños, Alexis.
— Feliz cumpleaños. — James le deseó también.
Alexis rió con levedad y agradeció.
— Pensamos que te había ocurrido algo. — Sunday se dirigió a mí esta vez, tenía cierta expresión de preocupación en su rostro. — ¿Has estado todo el día con él? — Asentí — eso es bueno...
— Por cierto, — intervino James — ha comenzado a nevar.
— ¿De verdad? — susurré sonriendo un poco y miré a Alexis, tal vez yo pudiera verlo, pero él no.
— ¡Sí!, ah, está hermoso allí afuera... si tan sólo pudiéramos ir todos... — la rubia bajó su entusiasmo y agachó la cabeza, en verdad era una buena persona.
— Cuando salga de aquí iremos todos, nos divertiremos... ¿sí? — Alexis trató de animar el ambiente, con una perfecta sonrisa, aunque bien sabía que ya para cuando él saliera la nieve estaría aún más densa y el frío sería enorme.
Él podía ser tan tonto a veces, pero en verdad, por más defectos que tuviera, lo queríamos. O bueno, yo lo quería. Demasiado como para que lleváramos tan poco tiempo juntos. La verdad era que no me importaba qué tanto pudiera hacerme. Quería que él estuviese sano pronto. Aunque cuando saliéramos, probablemente nos congelaríamos del frío allí afuera.
Sin embargo, todos asentimos con una sonrisa.
Estuvimos un rato hablando y riendo un poco, como siempre, como si nada en realidad estuviera pasando, pero no había manera de quejarme por ello, ya que era mejor a estar pensando constantemente en los problemas en los que nos veíamos envueltos. Ellos siempre sabían qué hacer para animar el ambiente.
Eran tan diferentes a mí, yo todo lo que hacía era generar tristezas y lástimas a quienes estaban a mi alrededor, no servía realmente para nada.
¿Cómo era que Alexis lograba compartir tanto tiempo con mi persona? No rechazaba su aprecio, pero en realidad, a veces llegaba a parecerme extraño que a pesar de haber visto demasiadas facetas de mi persona, cada una más asquerosa que la otra, él seguía allí, sonriendo, como si en realidad yo fuera el mejor sujeto de todos.
Tal vez lo entendía.
Tal vez no.
Pero a pesar de que fuera egoísta.
A pesar de que fuera infantil.
A pesar de que fuera terco.
Atrevido.
Acelerado.
Misterioso.
Yo en realidad apreciaba cada uno de sus actos.
Rogaba por que no se marchara.
Trataba de no aburrirle aún si eso me sacaba de mi zona de confort.
Sabía que le gustaba que sonriera. Por lo que cada día me esforzaba por regalarle una sonrisa. Como si fuera una flor.
No soportaría que él estuviera mal por más tiempo.
Quería que Alexis estuviera bien pronto.
¿De verdad me estaba gustando tanto el estar con alguien?

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Anquilosis
Novela JuvenilTal vez "amor" es una palabra muy complicada para alguien que ni sus propias piernas puede sentir. Tuvo una vida complicada, en donde toda cosa aparentemente buena que se manifestaba a su alrededor pronto perecía, por eso ni sus propios sentimientos...