«Debí dejarte, Taehyung. Justo en el momento en que vi tu estúpida sonrisa».
-¡Lárgate ahora mismo de mi casa!- gritaba el hombre con rabia y decepción.
-Papá, por favor... No tengo a donde ir- susurró Lisa con lágrimas en los ojos mientras su pad...
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¿Soy el único que ha dormido en tu cama?
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Con el paso de los días, la relación entre Lisa y Taehyung se había hecho cada vez más cercana. Tan sólo habían pasado dos semanas del "casi descubrimiento" por parte del padre de Lisa, pero ya eran varias las noches en las que el castaño había dormido en la cama de la chica. Aunque cada vez trataba de ser más y más precavido. Incluso dejaba su auto bastante alejado de la casa de los Manoban para no volver a levantar sospechas.
En todas esas noches ambos solo conversaban o comían alguna cosa que Tae comprara. El castaño nunca se atrevió a tocarla más de lo debido, aunque ese deseo de hacerla suya se intensificaba cada vez más. No le quedaba de otra más que recurrir a cualquier conquista que estuviese disponible en ese momento. Algo que Taehyung no podía evitar era fantasear con Lisa cada vez que estaba con otra. Imaginaba que las manos que lo acariciaban eran las de la pelirroja y se sentía miserable al abrir los ojos y ver a otra chica completamente diferente a ella gimiendo debajo de su cuerpo.
...
-Iré con Jisoo a una fiesta en la casa de Jennie- le anunció Lisa a su madre mientras salía de su casa.
-Ve con cuidado, cariño. No bebas mucho alcohol, sabes que a tu padre no le gusta.
-De acuerdo, mamá.
En el patio de la casa estaba Taehyung y su grupo de amigos tomando y riendo animadamente. Al ver llegar a Lisa, el castaño pensó que se acercaría a saludarlo, cosa que no pasó ya que la chica solo le sonrió antes de entrar a la casa acompañada de Kim Jisoo. El chico la siguió sigilosamente, esperando a que estuviera sola para poder ir con ella.
-Voy a saludar a Jin y ahora vuelvo, Lalice- Jisoo le guiño un ojo a Lisa y se fue dejándola sola, como siempre, en la escandalosa fiesta.
-Hola, Lalice- la chica se estremeció al sentir las manos de Taehyung sobre sus caderas presionando su espalda contra el pecho de él.
-Hola, Tae.
-Me sorprendió que no me saludaras- susurró -. Ahora me debes un baile- sin dejar que Lisa respondiera algo, Taehyung la empujó hacia el salón principal de la casa donde muchos chicos bailaban al compás de la estruendosa música. -Baila para mi, Lalisa- Tae se mordió el labio mientras veía como la chica, con la cara sonrojada por la vergüenza, movía sus caderas y su cintura al ritmo de la música. Sin pensarlo dos veces, el castaño comenzó a seguir los pasos de la pelirroja y se fue acercando cada vez más a ella, podían sentir como las caderas de ambos chocaban con cada movimiento. Las manos del chico se aferraban a las curvas de Lisa, el busto de ella presionaba contra el pecho de él y bailaban mirándose fijamente a los ojos. -Hay mucha gente aquí- dijo Tae -Acompáñame.
