«Debí dejarte, Taehyung. Justo en el momento en que vi tu estúpida sonrisa».
-¡Lárgate ahora mismo de mi casa!- gritaba el hombre con rabia y decepción.
-Papá, por favor... No tengo a donde ir- susurró Lisa con lágrimas en los ojos mientras su pad...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
No juegues conmigo, Tae.
{···}
Ya contaban diecisiete los días que Taehyung se había mantenido alejado de Lisa. Cada noche se le hacía más y más difícil dormir sin poder darle las buenas noches a la pelirroja. Incluso recurrió a Momo Hirai para controlar sus sentimientos por Lalisa. El castaño quería acercarse a ella de nuevo, pero ¿cómo la haría si ella misma fue quien lo alejó?
La solución perfecta al problema de Tae apareció el viernes gracias al profesor de literatura, quien les encargó hacer un trabajo en parejas con su compañero de banca. ¿Qué mejor pretexto para volver a estar cerca de Lisa?
Al salir del salón de literatura, Taehyung siguió a la chica para poder hablar con ella. Al pasar cerca del armario del conserje la cargó por la espalda tapándole los ojos para meterla dentro del pequeño cuarto. La chica estaba completamente aterrada, aunque se calmó un poco al ver el rostro del castaño:
-Taehyung... ¿Qué haces aquí? - sin decir nada, el chico la abrazó pegándola a su pecho -Eres muy raro, ¿lo sabías?- el castaño rió.
-Si, me lo han dicho en varias ocasiones.
-Por cierto... Si mal no recuerdo, te pedí que nos distanciáramos unos días, ¿no es así?- Lisa se alejó varios centímetros de Taehyung, quien sentía un gran nudo en la garganta. ¿Por qué demonios ella no entendía lo que le provocaba? ¿Por qué lo alejaba? ¿Acaso no veía lo mucho que le lastimaba su rechazo?
-S-s-si, lo q-que pasa es que tenemos que hacer el trabajo de literatura juntos... ¿Lo recuerdas?- dijo rascándose la nuca.
-Oh... Cierto- respondió pensativa.
-¿Qué? No me digas que lo habías olvidado.
-No, por supuesto que no, es sólo que... Bueno, no sé.
-Entonces, ¿tu casa o la mía?- preguntó bajando la mirada
-Tu casa- respondió ella rápidamente, no podía llevar a Taehyung a su casa, él ya había estado allí pero le preocupaba su padre, él no aceptaría que su hija llevara a un chico (que no fuera BamBam o Jungkook) a casa, ni siquiera para hacer un trabajo escolar.
-Perfecto- una gran sonrisa apareció en el rostro de Tae, le extendió un papel con su dirección.-No vemos en mi casa esta tarde, a las 5.- besó rápidamente la mejilla de la chica y se fue dejándola sola en el cuarto.
...
Al dar las 5 de la tarde, Lisa llegó a la dirección que le había dado Taehyung. Tocó la puerta del departamento y rogó para que fuera Tae quien le abriera. Ahí estaba el castaño, con un pantalón negro rasgado, los pies descalzos, el torso descubierto y el cabello húmedo con pequeñas gotas cayendo desde su frente hasta su abdomen.
