«Debí dejarte, Taehyung. Justo en el momento en que vi tu estúpida sonrisa».
-¡Lárgate ahora mismo de mi casa!- gritaba el hombre con rabia y decepción.
-Papá, por favor... No tengo a donde ir- susurró Lisa con lágrimas en los ojos mientras su pad...
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¡Kim Taehyung! ¡Abre la puerta ahora mismo!
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-Toma, Lalisa. Aquí está la autorización firmada- dijo Khalan Manoban entregándole a su hija la autorización del viaje a Japón –Mírame bien, Lisa. Más te vale no hacer ninguna locura en ese viaje ¿Entendido?
-Si, papá.- susurró Lisa antes de tomar los papeles y alejarse hacia su habitación a prepararse para ir al instituto.
Le había costado casi una semana convencer a su padre de que le permitiera ir al viaje, pero al final, con una gran ayuda de su madre, consiguió que su padre le firmara la autorización y le diera el dinero para pagar el boleto de avión y la habitación.
Al llegar al instituto corrió hacia el salón de japonés para entregar sus papeles, iba con casi una semana de atraso, pero tal vez tendría oportunidad de ir. Nerviosa se acercó a la profesora con los papeles en la mano:
-Disculpe, profesora Takami. Esta es mi autorización y el dinero para el viaje. Sé que lo estoy entregando bastante tarde, pero querría saber si todavía podía ir al viaje.
-No te preocupes, Manoban. Sabía que no perderías la oportunidad de este viaje- la mujer tomó los papeles de Lisa y le sonrió –Te espero el viernes aquí en el instituto a las 4 de la tarde con tus maletas.
-Gracias, profesora. Aquí estaré- sin más, se alejó con una gran sonrisa en el rostro.
¿El viernes? Le quedaban apenas dos días para hacer su maletas. Estaba emocionada y lo primero que iba a hacer era contarle a Taehyung que si podrían ir juntos al viaje.
Caminó por los pasillos del instituto buscando a su castaño hasta que lo encontró sentado en la cafetería devorando una manzana y leyendo un libro:
-¡Hola Tae!- le saludó ganándose una sonrisa de parte de él –Ya mi padre me firmó la autorización, ¡iré a Japón!
-¡Me alegro, Lalice! Te besaría, pero ya sabes...- bajó la cabeza desilusionado al ver a tanta gente entrando a la cafetería.
-Hola chicos- saludó Jimin.
-Hola- dijeron al unísono. Les molestaba un poco la inesperada presencia del rubio, pero no les convenía que los vieran solos todo el tiempo, lo mejor era no levantar sospechas.
-Me tengo que ir- dijo Lisa de repente –Debo contarle a Rosé lo del viaje a Japón.
-Oye, Lis. ¿P-P-Podrías darle estoy a Roseanne de mi parte? Es que no la he visto hoy- dijo Jimin bastante nervioso mientras le entregaba a la pelirroja un pequeño sobre de color rosa.
-Claro, no te preocupes.
...
-¡Voy a ir al viaje, pasta! ¿No es genial?
-Me alegro mucho, Lisa. Me entristecía no poder ir contigo.- la castaña la abrazó cariñosamente –Ahora tienes que responderme algo, Lis. ¿Qué te traes con Kim Taehyung?- eso tomó por sorpresa a la chica. ¿Es que acaso lo suyo con Tae era tan obvio?
-No me traigo nada, Rosé.
-No te creo- la castaña entrecerró los ojos.
-De acuerdo, Taehyung y yo somos novios- soltó rápidamente.
-¿Qué? ¿Cómo? ¿Desde cuándo?
-Desde hace casi un mes- susurró.
-¿Por qué no me dijiste nada?- la castaña hizo un tierno puchero.
-Tae y yo queremos mantenerlo en secreto- respondió Lisa con las manos en las mejillas.
-Me alegro por ti, Lisa. Pero, ¿estás segura de los sentimientos de Taehyung? Me refiero a que ese chico ha estado con más chicas de las que te puedes imaginar.
-Si, Rosé. Tae si me quiere, ¿por qué todos insisten en lo mismo?
-Entiende, a todos nos preocupa que ese chico te lastime. Nos importas y no queremos verte sufrir- le acarició el cabello a la pelirroja y la abrazó –Si tu lo quieres, confías en él y eres feliz, para mi está bien. Pero si te hace algo, te juro que lo mato.
-Gracias, Rosé. Por cierto...- dijo sacando el sobre de color rosa –Esto te lo envía Jimin, dijo que no te había visto y me lo dio. ¿No crees que sea raro?
-Si, algo- tomó rápidamente el sobre –Me tengo que ir, Lisa. Nos vemos después. Te quiero- se despidió bastante nerviosa.
-¿Qué estarán tramando esos dos?- susurró Lisa al ver que su amiga se iba rápidamente y sin soltar el sobre.
-¿Hablando sola, preciosa?- susurró Taehyung en el oído de Lisa.
-¡Tae!- lo abrazó y besó su mejilla.
-El profesor de Literatura se fue y saldremos una hora antes- le dijo el castaño moviendo las cejas -¿Quieres ir por un helado?- la cara de Lisa se ilumino y en su labios se dibujo una gran sonrisa –Tomaré eso como un si- el chico la tomó de la mano y caminaron juntos hacia la salida del instituto.
-¿Qué hora es?- preguntó Lisa mientras compraban una cubeta de helado de leche en el supermercado de la calle de Taehyung.
-Es la 01:47... Todavía falta una hora para que te vayas a tu casa. Por lo que podemos comernos el helado en mi casa.
...
Ya habían terminado de comer todo el helado cuando el castaño se dio cuenta de la pequeña mancha que había en la barbilla de Lisa. Lentamente se acercó a ella, tomó su rostro entre las manos y besó su barbilla para eliminar la mancha, sin pensarlo dos veces, besó sus labios sin previo aviso. Lalisa se sorprendió al sentir los labios del chico sobre los de ella, rápidamente imitó el movimiento de los labios de él creando una perfecta sincronía entre ambos.
No pasó mucho tiempo para que Taehyung tomara a la pelirroja entre sus brazos y se recostara con ella en el sofá, sin embargo, esta vez se sentó con ella a horcadas de él y comenzó a depositar pequeños besos por el cuello de la chica, bajando por su clavícula y sus hombros mientras acariciaba suavemente su plano abdomen y sus muslos. Lisa se dedicaba a besar las sienes de Tae y a acariciar su cabello y sus hombros.
El castaño intentaba sacarle la sudadera a Lisa por la cabeza pero un golpeteo en la puerta los hizo separarse inmediatamente:
-¡Kim Taehyung! ¡Abre la puerta ahora mismo!- Lisa miraba confundida a Taehyung, quien se apretaba el puente de la nariz y negaba con la cabeza al escuchar aquellos gritos femeninos tan conocidos para él.
