«Debí dejarte, Taehyung. Justo en el momento en que vi tu estúpida sonrisa».
-¡Lárgate ahora mismo de mi casa!- gritaba el hombre con rabia y decepción.
-Papá, por favor... No tengo a donde ir- susurró Lisa con lágrimas en los ojos mientras su pad...
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¿Te acostaste con el?
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Taehyung abrió los ojos lentamente para encontrarse lo que, para él, era la imagen más hermosa del mundo: Lisa dormía plácidamente, con la cara apoyada en su hombro y el brazo alrededor de su abdomen. El flequillo despeinado, los labios entreabiertos, las largas pestañas rozándole las mejillas. Las sábanas apenas le cubrían la mitad de la espalda, dejando al descubierto sus hombros y el comienzo de sus pechos desnudos. El castaño la miraba totalmente embelesado, se veía tan bonita, definitivamente Lisa era un ángel, no, no era solo un ángel, ella era su ángel.
Poco a poco la pelirroja abrió los ojos topándose con un despeinado y sonriente Taehyung mirándola con ternura:
-Buenos días, ángel.
-Todavía no entiendo por qué me dices ángel- respondió en un bostezo.
-Bueno, Lisa- comenzó a jugar con mechón de su cabello rojizo –Lo que pasa es que, aunque me encanta tu nombre, creo que ángel te queda mejor- depositó un beso en la cabeza de ella.
-Como sea- rodó los ojos -¿Qué hora es? Tenemos que prepararnos para irnos, el vuelo sale 7 a las de la mañana.
-Es la 1 de la mañana, apenas dormimos como una o dos horas.
-Creo que mejor ya tengo que irme, Tae. Puede venir algún profesor y estaríamos en problemas.
La chica se sentó en la cama sin percatarse de la desnudez de ambos. Las sábanas cayeron dejando al descubierto los senos de la pelirroja y el pecho del chico. Lisa se sonrojó fuertemente y se tapó con los brazos al notar la oscura e intensa mirada de Taehyung fija en sus pechos.
-No entiendo por qué te cubres Lis- le dijo Tae apartándole los brazos –Ya te dije que eres preciosa – se sonrojó aún más y apartó la mirada de la del castaño –No te avergüences conmigo, Lalice- el chico levantó el rostro de Lisa y la besó delicadamente. Con cuidado la volvió a recostar en la cama y se colocó sobre ella. Lentamente dejó un camino de besos por la mandíbula hasta llegar al cuello de Lisa, el cual besó y lamió haciendo estremecer a la chica. El castaño sonrió satisfecho al escuchar que un fuerte gemido se escapaba de los labios de ella.
De repente Taehyung los volteó quedando Lisa sentada encima de él. El chico miró fijamente los senos Lisa, evaluándolos con la mirada. Los toqueteó suavemente y los besó antes de dirigirle una traviesa sonrisa a la pelirroja:
-No son la gran cosa, en realidad, son bastante pequeños- dijo Lisa dirigiéndose a sus senos. Taehyung aún la miraba sonriente, pero comenzó a menear la cabeza de un lado a otro en negación.
-No sabes lo que dices- besó la punta de su nariz –Son perfectos- besó los pezones y los labios de Lisa –Tu eres perfecta- susurró contra los labios de ella. Siguió acariciando y besando los senos de Lisa y escuchando sus leves gemidos, cuando creyó que estaba lo suficientemente excitada, se apartó de ella, tomó de nuevo la caja de condones, sacó uno, se lo colocó frente a la tímida mirada de la chica y deslizó su delgado cuerpo sobre él sin dejar de verla directamente a los ojos. A Lisa le sorprendió no sentir el mismo dolor de la primera vez, solo sentía un poco de incomodidad debido a la posición.
