«Debí dejarte, Taehyung. Justo en el momento en que vi tu estúpida sonrisa».
-¡Lárgate ahora mismo de mi casa!- gritaba el hombre con rabia y decepción.
-Papá, por favor... No tengo a donde ir- susurró Lisa con lágrimas en los ojos mientras su pad...
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¿Soy la única que ha dormido en tu cama?
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-Nos vemos mañana- dijo el pelinegro tratando de sonar los más firme posible.
-¿Qué pasó, TaeTae?- preguntó la chica preocupada.
-Vas a conocer a la abuela de tu hijo- respondió atemorizándola -. Mi madre va a venir mañana, parece que a Jimin le gustar andar de chivato- se lanzó al sofá con las manos en la cara -, recuérdame que debo asesinarlo la próxima vez que lo vea.
-¿Tu madre sabe que estoy embarazada?- Taehyung asintió sin mirarla –Y supongo que está enojada.
-Furiosa- corrigió -, pero no te preocupes, nos apoyará, sólo hay que tenerle paciencia- la calmó.
-Es muy tarde, creo que debería irme a casa ya- intentó levantarse pero el chico se lo impidió:
-Quédate, por favor Lalice- suplicó -, pasa la noche conmigo, ¿Sí?- parecía un niño pequeño, le causaba mucha ternura.
-Bueno- suspiró para luego lanzarse a los brazos del pelinegro y acurrucarse en ellos -. Tengo sueño- bostezó.
-Venga, a la cama- intentó levantarla pero ella se negó.
-No quiero moverme, tengo mucho sueño- protestó con su típico aegyo. Taehyung sonrió, incluso embarazada Lisa seguía siendo tierna al punto de causar diabetes.
-Muy bien, señorita embarazada- la levantó en sus brazos y caminó con ella hasta su habitación para recostarla cariñosamente en la cama -, así está mejor.
-Pero si yo estaba tan bien en el sofá- protestó.
-No dejaré que mi novia embarazada duerma en un sofá- resopló.
-La última vez que dormí aquí fue cuando... ya sabes, hicimos a esta bolita- se señaló el vientre -¿Qué? En la ecografía parece una pequeña bolita.
-Genial- rió –la mayoría de los padres llaman a sus hijos Junior, Campeón, Princesita, o cosas por el estilo, nosotros llamamos a nuestro bebé PequeñaBolita, somos unos padres muy poco convencionales ¿no crees?
-Pues sí, pero míralo desde esta perspectiva: esos nombres ya están pasados de moda, nuestro apodo es bastante original, a decir verdad- ambos rieron.
-Vamos a dormir, yo también tengo sueño- se quitó la ropa rápidamente y se colocó los pantaloncillos de dormir, la chica lo miró desorientada:
-No tengo ropa aquí.
-Toma- le extendió una camiseta negra bastante grande que hacía juego con su pantalón.
