«Debí dejarte, Taehyung. Justo en el momento en que vi tu estúpida sonrisa».
-¡Lárgate ahora mismo de mi casa!- gritaba el hombre con rabia y decepción.
-Papá, por favor... No tengo a donde ir- susurró Lisa con lágrimas en los ojos mientras su pad...
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No estás sola, Lalice, yo estoy aquí para ti.
{···}
Se quedó mirando el mensaje con la boca abierta y después levantó la vista hacia la silueta dormida del chico. Había estado por ahí hasta casi las cuatro la madrugada, bebiendo... ¡con Taeyeon!
Lo volteó a ver al escucharlo roncar un poco, durmiendo el sueño de los borrachos, aparentemente inocente e ignorante a todo. Se veía tan joven, tan sereno.
«Oh no, no, no...No caigas, no caigas, no lo hagas.»
Sus piernas se convirtieron en gelatina y se dejó caer lentamente en una silla fuera de la habitación, no podía seguir viéndolo, le haría daño si lo hacía, estaba furiosa, cegada, incrédula. Una sensación de traición cruda, amarga y humillante le invadió el cuerpo. ¿Cómo pudo? ¿Cómo pudo terminar con ella? Unas lágrimas calientes y furiosas corrieron sus mejillas. Sí, no era la primera (y muy probablemente no sería la última) vez que él la hacía llorar. Casados o no. Embarazada o no. El final de ambos siempre era el mismo.
¿Y qué podía esperar? Se había casado con ese niño/hombre demasiado rápido. Lo sabía... Sabía que llegarían a eso, ese momento de inflexión en el que uno de los dos se quebraría y todo se arruinaría. Pero... ¿por qué así? ¿Por qué de esa manera tan dolorosa? ¿Por qué? ¿Por qué? Cómo había podido hacerle eso? El cuchillo que sentía en el corazón se hundía lentamente haciendo la herida todavía más profunda. ¿Siempre sería a ser así? ¿Con Taehyung siempre iba a ser así?
No, no, no... No podía creer que siempre fuera a ser así, dos pasos adelante y cinco atrás. Pero siempre había sido así con él. Después de cada revés, volvemos a avanzar, centímetro a centímetro. Lo conseguiría... lo haría, se despertaría, pediría perdón y volvería a ser el de antes. Pero ¿podría ella? ¿Podría recuperarse de tanto... de tanta traición?
«Oh, TaeTae... ¿Qué voy a hacer contigo? ¿Y qué demonios hacías tú con esa zorra arrogante? Necesito saberlo.»
Se acurrucó en la pequeña cama de la habitación secundaría del piso de debajo de la cabaña, se envolvió en la suave colcha y sacó el teléfono del bolsillo de la sudadera. Miró los mensajes y encontró el de la zorra que se me había reenviado desde el teléfono de Taehyung. Pulsó «Responder» y escribió:
Lisa: ¿QUIERES QUE TAEYEON SE UNA A NOSOTROS CUANDO HABLEMOS DE QUÉ TAL HAN PASADO LA NOCHE? ASÍ NO TENDRÁS QUE SALIR CORRIENDO A BUSCARLA DESPUÉS.
CON CARIÑO, LA "SEÑORA KIM".
Hoy a las 4:07 a.m.
Se acomodó bajo la colcha. A pesar de todo, estaba realmente abrumada por la enormidad de la decepción de Taehyung. Debería ser un momento feliz. Estaban casados. Era su luna de miel. Por Dios...iban a ser padres.
