Reanimando su corazón: Cristian y Anastasia

Capitulo 56

3 meses después

POV ANASTASIA

Me acomodo en el sillón para ver una película. Es día sábado y Cristian por fin tiene un fin de semana completo libre. Ha estado con tanto trabajo y casos que no ha tenido mucho tiempo para nosotros.

El hospital hizo un listado con pacientes en espera de cirugía y en el área de la neurocirugía había 120 personas en espera. Así que estos tres meses han sido una operación tras otra para Cristian. Si no lo conociera como lo conozco, yo creo que en este momento, debería estar odiando su vocación.

El día de ayer fue mi último día como doctora activa en el hospital. Nunca en mi vida había leído tantas fichas clínicas y en verdad la espera por atención en el hospital era larguísimas.

Menares hizo unos cambios y me saco de la unidad de emergencia y me mando a la unidad ambulatoria del hospital. Tenía el mismo horario en la urgencia, solo que ahora tenía un número limitado de pacientes, con la excepción de unos cuantos sábados que tuve que ir a apoyar al servicio de pediatría.

Me encanto ese tiempo. Los niños venían por controles y por derivaciones. Las enfermeras y técnicos que trabajaron conmigo, fueron muy amables y colaborativos. Creo que fuimos uno de los servicios que mejor fueron evaluados y me encanta.

Lo malo, es que no puedo volver hasta que mi bebé nazca y tenga por lo menos unos 5 meses de edad. No sé qué hare tanto tiempo en casa pero las ingeniare. Con dos bebés pequeños, tiempo libre, lo veré poco.

Siento que Cristian se acerca y me derrito cuando lo veo que viene con Lucían en sus brazos. No es la primera vez que lo toma pero esta descalzo y solo lleva el pantalón del pijama. Con el embarazo tengo tantas ganas de sexo que cuando está en casa, literalmente le saltaba encima y si se puede considerar, lo abusaba físicamente. Aunque nunca se ha quejado al respecto.

Se acomoda en el sillón que queda justo al frente de la TV. Me levanto con cuidado y camino hasta quedar a su lado. Estar embarazada de 8 meses, es incómodo en ciertas cosas que antes se podían hacer normal. Levantarse del sillón, es una situación que mi cuerpo está tomando con un sufrimiento diario.

-pa... pa... pa...- dice Lucían que está feliz en el regazo de su padre.

-estás muy inquieto- dice mientras lo ayuda a mantenerse levantado en sus piernas. Este pequeño individuo ha dado unos cuantos pasos pero no un poco cobarde en ese aspecto. Aún no está comprando la idea de caminar.

-pa... pa... pa... pa...- dice y se lanza a su pecho. Cristian besa la cabeza de Lu y comienza a jugar con sus dedos.

-¿Qué es lo que veremos?- digo. Necesito llamar la atención de los dos.

-no sé. Cualquiera estará bien. Me gustaría haber podido dormir por varias horas más pero este pequeño, me despertó- dice mientras le besa la mejilla. Lu se ríe fuerte y niega con su cabeza cuando siente la barba de su papá.

-ha estado inquieto. Te extraña y como has estado todos los días en el hospital no es mucho lo que has estado con él- le digo. Sé que le duele eso pero es la verdad.

-lo sé. Pero solo me queda una semana más y esta serie de operaciones terminaran. Le dije a Menares que cuando naciera el bebé, necesitaba vacaciones. Quiero estar con él o ella- dice mientras indica mi vientre. Me rio porque el pequeño señorito incognito, no se ha querido mostrar en las ecografías. Cristian ha estado de un humor de perro después de cada control.

-estaré fuera del hospital por varios meses, así que este pequeño, me tendrá para el solo. Bueno, tendrá que compartirme con Lu pero sé que lo superaran- digo.