Capitulo 18

11.3K 873 69
                                    

POV ANASTASIA

-Ana acaba de llegar un niño. Participo en un accidente de tránsito. Según la madre, fueron atropellados por una camioneta. Desde ese momento ha sentido dolor en su pierna derecha. Lo están controlando y luego pasaran aquí- dice Martin.

-¿solo a él? ¿Y la madre?- le digo mientras me giro en la silla.

-los dos pero según ella, no tiene nada- dice.

-de acuerdo. Cuando lleguen hazlos pasar. Quiero que llames al doctor Allan revise a la madre. Un atropello no se puede tomar a la ligera- digo. Mañana por fin me sacan la bota y paso a rehabilitación y hace dos días volví al hospital.

Cristian no estuvo muy a gusto pero él lo sabía desde hace mucho tiempo. Aun así, se resistió lo más que pudo. Incluso su madre lo regaño. Le dijo que se estaba comportando como un niño chiquito. Así que tenemos un plan.

Cristian, Grace y yo tenemos la oportunidad de entrar 15 minutos más tarde por él bebe. Me explico. Los turnos son de 12 horas, a excepción cuando hay alguna operación que requiera más horas. Los turnos comienzan con 12 horas diurnas, ósea, se entra a las 8 de la mañana y la salida es a las 8 de la tarde. Luego, al día siguiente entramos a las 8 de la tarde y salimos a la 8 de la mañana del día siguiente. Con eso tenemos día y medio libre. Todo el día que nos queda cuando salimos a las 8 de la mañana y el siguiente. Así, al quinto día, volvemos al hospital.

Bueno eso es para mí y Grace, para Cristian los turnos son de 24 o 36 horas si es necesario. Por este motivo tanto Grace como yo somos las que nos hacemos cargo de Lucían cuando Cristian no está. Cuando Grace tiene turno de noche, ella entra a las 8 de la tarde, yo entro a las 8 de la mañana y salgo a las 8 de la tarde, por este motivo, ese día ella puede entrar a las 8:15. Así me puede entregar al bebé sin ningún problema.

Lucían, mi cachorro está cada vez más grande y más hambriento, por lo que mi cuerpo realmente se ha convertido en una máquina de producción de leche. Si antes producía cerca de medio litro, ahora estoy produciendo el doble. Hay bolsa y bolsas en la nevera y al ritmo que voy, abra que comprar una congeladora solo para mi leche.

 Hay bolsa y bolsas en la nevera y al ritmo que voy, abra que comprar una congeladora solo para mi leche

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cristian no me ha vuelto a besar. Aunque sea el más mínimo roce y por tonto que parezca, se siente mal. Dios, quiero que un hombre me tome en sus brazos y me bese como si fuera su única meta en el mundo.

He pasado tanto tiempo metida en mi habitación estudiando, en una computadora estudiando y en mis clases estudiando que nunca pensé en estar con alguien. Siempre mi prioridad fue terminar mis estudios.

Amigos no tenía y tampoco es que quisiera tenerlos. La mayoría eran mujeres egocéntricas, que lo único que esperaban era que cuando tuvieran el título en la mano, conocieran a un médico maduro que las mantuviera, ¿Por qué pasar 5 años estudiando y reventándote los sesos por un título que jamás ocuparías? Mis compañeros eran buena gente pero cargantes. Por eso, al fin, decide seguir sola.

Reanimando su corazón: Cristian y AnastasiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora