XL: Julio César

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Al salir por la noche a contemplar las estrellas recordé mi pasado con César, el gran general.

Era increíble pensar que ya habian pasado varios años desde que lo vi por primera vez.

Era tan solo una joven de 21 años, estaba asustada pero decidí arriesgarlo todo para poder verle, así él me recordaría como la joven temeraria que arriesgo su vida para cambiar su propio destino. Me infiltre en el palacio envuelta en una alfombra y me presente ante César con el vestido más bonito que tenía, y le encante.

Tenía algo a mi favor, juventud.

A César le gusto mi belleza, pero más aún mi astucia e inteligencia. Él era mi mejor amigo, con él podía intercambiar puntos de vista sobre diferentes temas, podíamos hablar y hablar y jamás aburrirnos, éramos el uno para el otro.
Recuerdo cuando viajamos por Egipto, le mostré las maravillas de mi país y los dioses, él no se resistió, se enamoró de Egipto.

Tuve un hijo con él, creíamos que Ptolomeo César sería el futuro de Roma y Egipto quien uniría nuestros países en un solo reino.

Viaje a Roma y conocí gente importante, cuando viaje por segunda vez tuve la oportunidad de contemplar el desfile triunfal de César, vi todo lo que gano con esfuerzo en sus batallas, él era un gran general.

Poco tiempo después lo asesinaron en el lugar donde juraron cuidar su vida, lo asesinaron en el Senado. Perdí un aliado, un compañero, un amigo, un amante.

César fue mi salvación, no pude apostar por alguien mejor, pero no corrí con la misma suerte dos veces.

Más que mi amante, él era mi amigo. Nunca me permití sentir algo más que aprecio, nunca le ame. Mi vida dependía de él, cuando me salvó solo sentí agradecimiento. Sé que él me amo y eso lo llevo a morir ¿ese era mi nuevo destino?

- César ¿realmente tengo que pasar por esto? ¿por qué no reconocíste a tiempo a tu hijo? Me has dejado sola, y escogí mal al hombre que me cuidaría y haría poderosa en tu lugar- Mire al cielo.

La diferencia entre César y Marco Antonio era abismal, dos hombres totalmente diferentes. Por un lado estaba César quien fue un gran general y conquistador, la experiencia estaba de su lado, le respetaban en Roma y extendió los territorios de su país gracias a sus batallas. Marco Antonio también era bueno en el campo de batalla, sin embargo no era bueno realizando sus estrategias, era amante del vino y disfrutaba de embriagarse.

A César le atribuían el nombre del dios Horus, el protector de los faraones, mientras que a Antonio le llamaban Dionisio, el dios del vino.

Y la más grande de todas las diferentes entre ellos dos es que... A César lo utilice y a Antonio le ame.

La última reina Donde viven las historias. Descúbrelo ahora