Cap. 4

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-Ya estás Aria?- le pregunté a mi hermana, que se arreglaba en el baño -

-Ves tirando Jenn, tardaré un poco.-

-Está bien, no llegues tarde tu primer día.-

Salí de casa con la mochila puesta en un hombro.
Me puse los auriculares mientras miraba el móbil caminando.
Ya casi llegaba al edificio, ví a algunos grupos de amigos que caminaban con el mismo uniforme que yo, hablando animados.
Llegué a la puerta, había una verja blanca abierta, unas escaleras de cemento hacia la entrada del edificio y varios alumnos en la puerta.
Me llevaba la mayoría de miradas mientras subía las escaleras, susurraban cosas y hablaban a mis espaldas, cosa que odio.
Entré al edificio, casi nadie había entrado.
Había un largo pasillo com taquillas azules.
Las clases estaban a lo largo del pasillo y al final un giro a la izquierda.
Seguí por el pasillo hasta llegar al final, giré a la izquierda encontrándome con varias puertas.
Me paré delante de la del director y piqué tres veces.

-Adelante.- dijo una voz gruesa y fría -

-Buenos días.- dije cerrando la puerta detrás mio -

-Buenos días. Siéntate.- ordenó el hombre con la barba dejada, con canas y el pelo corto castaño - Soy el señor Fletcher, director se este edificio.-

-Mucho gusto.- dije seria y asintió - Soy Jennifer Vega, es mi primer día y me dijeron que pasara a por los horarios aquí.- asintió sacando unos papeles del cajón -

-Este es tu horario.- dejó un papel encima de la mesa, lo cogí y revisé - Aunque estarás en una clase y los profesores se irán turnando.- asentí - Quieres que llame a algún alumno para que te enseñe las instalaciones?- negué con la cabeza -

-No hace falta, gracias. Aula 112?- pregunté y asintió - Gracias señor Fletcher.- sonrió forzadamente y salí de su oficina -

Caminé llevándome la atención de la gente, hasta llegar a mi taquilla.
Abrí la taquilla y guardé un par de cosas.

-Hola.- dijo una voz de chico a mi lado y cerré la taquilla mirándole a los ojos -

-Hola...- dije colocándome la mochila -

-Soy Markus, eres la nueva verdad?- dijo tendiéndome la mano -

-Sí, Jennifer. Un gusto.- sonreí -

-Puedo enseñarte el edificio?- dijo apoyado en las taquillas -

-No hace falta, me las apaño sola.- dije con media sonrisa -

-Está bien... a qué clase vas?- preguntó mientras un grupo de chicas se acercaban a mi -

-Hola, eres nueva.- preguntó una chica de mi misma altura, morena y de ojos castaños claros - Soy Laura.- me tendió la mano con una sonrisa -

-Sí... Jennifer, encantanda.- le dí la mano con gusto -

-Ellas son Clara, - señaló a una chica de tez muy clara, con pecas en la cara, rubia con el pelo corto - Thais - una chica con el pelo negro, atractiva, de ojos azules - Y él es Thomas.- un chico alto, musculado, rubio y con ojos azules, que me miraba comiéndome con la mirada -

-Mucho gusto.- dijo Thais y Clara -

-Igualmente.- dije con una sonrisa -

-Encantado.- dijo Thomas dándome la mano -

-Igualmente.- dije dándole la mano -

-Tú que haces aquí, Markus?- dijo Clara -

-Presentarme a la nueva.-

-Tengo un nombre.- dije mirándole con una ceja alzada -

-Déjalo, va de flor en flor.- dijo Thais mirándole de arriba a abajo y de repente paró frente a mi un rubia, con pinta de pija mimada, y por las miradas que ponían Clara, Thais, Thomas y Laura deduje que era la típica popular sin oxígeno en la cabeza -

-Hola novata.- dijo cruzada de brazos, mirándone desafiante, no medía más que yo, y llevaba a sus dos perritas comiéndole el culo detrás -

-Hola, tienes algún problema?- dije con media sonrisa que pareció molestarle -

-No creo que quieras meterte en problemas novata...-

-No me llames así.-

-Qué pasa? Es que te afecta?- dijo incrédula y la gente hizo un círculo alrededor -

-A mi no me afecta nada, a ti lo que te afecta es que no te llegue la sangre a la cabeza. Así estás.- la gente abucheó y gritó mientras la cara de la rubia era todo un espectáculo - Si no te importa tengo cosas más importantes que hacer que hablar contigo.- la gente seguía flipando - Encantada.- sonreí y salí de allí lo más rápido posible -

Todos hablaban riendo con Katia, mientras ella se hacía la ofendida y caminaba como pija con sus amiguitas detrás de ella hacia vete a saber dónde.
Caminé hacia la clase 112 y entré, todavía no había nadie.
Me senté por el medio de la clase y la gente comenzó a entrar.

-Puedo sentarme a tu lado?- preguntó un chico y otro le empujó levemente -

-Yo me lo pedí primero.- dijo y rodé los ojos -

-Dejarla en paz.- dijo Laura apartando a los chicos - Iros a babear a otro lado.- dijo apartándolos y reí -

-Gracias...- dije apoyando la cabeza en una de mis manos -

-No hay de qué... puedo sentarme?- preguntó señalando el sitio a mi lado y asentí - Son todos unos babosos.- dijo sacando su libreta -

-Por eso me hice lesbiana.-

Después de clasesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora