Cap. 37

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*Pov Lyna*

Sé que le afectó.
Mucho.
Pero no sabía qué hacer, yo estaba con Maikel y...
Ella tenía un comportamiento de niña pequeña, muy tierno para mi, pero también a la vez era madura y una persona de corazón noble.
Besaba de infarto, te quedabas con ganas de más casa vez que rozaba sus labios, era como un paraíso, era como encontrar lo que munca habías conseguido conseguir y... ella era eso.
Me asustaba que me pudiera enamorar de ella, me asustaba estar a su lado y no poder controlar mis sentimientos, no quería hacerle daño...
Pero era inevitable no preocuparse por ella, era inevitable no venir a verla y pasar un tiempo con ella.

-Listo.- dijo el enfermero abriendo la puerta -

Entonces ví que pasó Jennifer, con el brazo enyesado, parecía dolida y es que se dió un buen golpe, pero ella era fuerte, y no dejaba ver su dolor a los demás.
Era ese tipo de personas que sufren por dentro, que por dentro hay tormenta y por fuera un arcoíris...
Su mirada iba agachada, sabía que no quería mirarme a los ojos.
Se sentó en su camilla y le miré de espaldas.

*Pov Jennifer*

-Te encuentras bien?- dijo y asentí - Quieres algo de comer? Bajaré a...- interrumpí -

-No, gracias.- suspiré -

-Jennifer...- volví a interrumpir -

-Es igual Lyna, ahora mismo no me apetece hablar de esto.- dije seria y se levantó cogiendo su bolso -

-Nos vemos mañana, Jennifer.- nuestras miradas conectaron llenas de sentimientos una vez más, y se fué -

Dolió verla así, no voy a mentir, dolía que se fuera de mi lado y que no estuviera sentada ahí, en ese sillón incómodo en el que no le importó lo más mínimo la comodidad y se quedó para ver cómo estaba yo...
Suspiré sabiendo que la había cagado, y mucho.
Pasé la tarde durmiendo un poco, estuve con el móbil un rato y miré por la ventana.
Tampoco podía hacer más y me dolía tanto el cuerpo que prefería no levantarme.
Más tarde vinieron Aria y mi madre, con una bolsa donde guardaron el pijama y algunos productos.
Vimos algunas películas que emitían en la pequeña televisión colgada de la pared y caí dormida.
Mi hermana durmió conmigo y mi madre en el sillón, en el que me dí cuenta de que se podía respaldar para mayor comodidad.

-Jennifer Vega...- dijo una voz algo conocida delante mio y abrí lentamente los ojos -

-Enfermero...- dije desganada retorciéndome en la cama -

-Por lo que veo está mejor.- dijo sonriente mirando a Aria y a mi madre, que dormían plácidamente -

-Lo estoy, bien acompañada.- sonreí -

-Bien, aquí está su desayuno.- señaló la bandeja con... tostadas, vaya, va mejorando -

-Gracias...- dije bostezando -

-Le dejo dormir, no olvide el desayuno.- dicho eso se fué y miré la comida con los ojos entrecerrados -

-Puede esperar.- dije volviendo a cerrar los ojos -

Y después de volver a dormir un rato más, desperté y desayuné las tostadas.
Aria y mi madre se fueron a desayunar al bar de abajo y encendí la televisión buscando algo que me pudiera desaburrir.

-Las siete!?- dije mirando la hora -

-Cariño, voy a llevar a Aria a clases.- dijo mi madre entrando a la habitación -

-Vale mamá, tú quédate en casa, nuestras camas son muchísimo mejores que estas...- rió - Descansa un poco, luego vendrán unos amigos aquí.- sonreí -

-Está bien cariño, esta noche ya podrás salir de aquí.- me dió un beso en la frente - Te quiero.- sonreí -

Ví un poco más la televisión, estaba mejor que ayer, y estaba demasiado inquieta.
Estar tanto tiempo en la cama me cansaba, necesitaba salir a dar una vuelta, así que me levanté de la cama, me peiné y me repasé el maquillaje con solo una mano y me miré frente al espejo.
Me quité el pijama y con cuidado y bastante dificultad me puse unos jeans negros rasgados por las rodillas, una camiseta blanca de manga corta y una chaqueta verde militar abierta, sin abrochar.
Me puse unas bambas blancas con plataforma y noté un fuerte dolor en el brazo.
Era normal.

-Vaya mierda...- me quejé tocándome el brazo -

-Te duele?- preguntó una voz muy familiar en la puerta -

-Y tú qué haces aquí!?- dije levantando la voz, sorprendida y llena de rabia -

Después de clasesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora