Después de clases

Cap. 18

-Mamá.- estábamos ella y yo, solas, Aria en su habitación - De verdad que te han detectado problemas en el corazón?- dije con el rímmel corrido, y las lágrimas cayendo por mis mejillas -

-Ven aquí...- abrió los brazos y me lancé a ellos -

-L-Lo siento... d-de verdad...- dije llorando en sus brazos -

-Tranquila cariño, eso no es culpa tuya.- me acariciaba la espalda -

-Por qué te pasa todo a ti mamá?- dije con la voz dolorida - Por qué castigan a los que mejor se portan mamá!?-

Lloré una media hora, de pié, abrazada a mi madre.
Cuando las lágrimas ya no caían tan caudalosas, nos separamos y nos sentamos en el sofá para explicar todo más calmadas.

-Me han detectado un problema en el corazón, da mareos, desmayos, y hace que el corazón palpite a más velocidad de lo normal...- interrumpí -

-Cómo te afecta eso?-

-Los desmayos pueden ser cada vez peores, no se sabe.- miré hacia el techo intentando no llorar y puse mis manos en la cara -

-Hay cura?- pregunté con un hilo de voz -

-Sí...- levanté la cabeza, iluminada - No, Jennifer...-

-Mamá hay una cura, no te pasará nada.- dije calmada -

-No podemos permitirnos ese medicamento.- me levanté del sofá segura y firme -

-Cuánto?- pregunté con seguridad y mi madré me miró no muy convencida -

-Diezmil.- abrí los ojos como platos -

-Qué?-

-Diezmil euros.- me llevé las manos a la cabeza, iba a vomitar -

-Dime que no es verdad...-

-Lo es.-

-Mierda!- golpeé la pared haciéndome heridas en los puños -

-Eh... Jennifer...- me cogió por los hombros - Tranquila cariño.-

-No mamá! Tranquila no! Puedes desmayarte en cualquier momento!- grité nerviosa -

-Por eso, os pido que no me pongáis nerviosa...- la volví a abrazar fuertemente -

-Te quiero...- le dí un beso en la mejilla - Lo siento mamá, pero vas a salir de esta.- dije segura y sonrió con apenas fuerza y un brillo en los ojos -

-No llores nunca cariño, eres preciosa...- puso su mano en mi mejilla -

-T-Te quiero...- rompí a llorar -

Sacaría a mi madre de esta, costara lo que costara.
El mundo se me había caído encima.
Había que ser fuerte, pero en esta situación era demasiado débil.
Mi madre había sufrido mucho, ha estado toda su vida sufriendo, no podía permitir ahora esto.
No.
Todo saldría bien, costara lo que me costara, daría mi vida por ella, haría lo que fuera por ella, por que no volviera a sufrir y por que disfrutara aunque sea un periodo de tiempo corto.
No permetiría que mi madre nos dejara, la vida había sido muy injusta con nuestra família.
La que más sufrió, mi madre.
En cambio mi padre, maltratador, rico y divirciado, haciéndonos sufrir constantemente.
No permitiría esto.
Haría lo que fuera.
Y con eso incluyo TODO.

-Mamá, tómate un baño, tengo que hacer una llamada importante.- dije segura y asintió mirándome con preocupación -

Salí a la calle con el móbil.
Me temblaban las manos, tenía el pulso descontrolado.
Con dificultad marqué el número y llamé.

-Sí?-

-Necesito dinero.- dije con un nudo en la garganta -

-Mañana a las 5 en Blackfills.- colgó y miré al cielo -

-Te voy a sacar de esta mamá... lo prometo.-