Después de clases

Cap. 43

-Mamá saldré esta noche.- dije cogiendo las llaves de la moto -

-Vale cariño, no tardes en llegar.- me dió un beso en la mejilla y le abracé fuerte -

-Te quiero mucho.- le susurré al oído y sonrió tiernamente - Adiós...-

Subí a la moto y conducí hasta casa de Lyna.
Me daban escalofríos solo de pensar volver a pisar su casa.
Al llegar Maikel me abrió la verja del jardín y aparqué la moto delante del garaje.

-Buenas noches...- dijo Maikel dándome la mano y ví que tras de él venía un chico qlto, pelo rubio, ojos azules verdosos y... bastante fuerte - Él es Nate, ha tuneado varias motos.- sonrió tendiendome la mano y la cogí con gusto -

-Encantada.-

-Igualmente.- sonrió de medio lado -

-Vamos adentro a tomar algo.- dijo Maikel caminando hacia la entrada y le maldecí interiormente -

Al abrir la puerta ví a Lyna con la mirada perdida en el sofá, tenía las piernas encima del sofá, cogía una taza de té entre sus manos, parecía... cansada, triste.
Llevaba puestas unas mallas negras y una chaqueta de deporte gris.
Estaba guapa hasta con chándal...
Al entrar nuestras miradas conectaron unos segundos, me miró sorprendida y apenada.
Yo desvié la mirada al suelo algo nerviosa.

-Siento que tengáis que...- dijo Maikel mirándonos a ambas -

-Tranquilo.- dije mirándola de reojo y se puso a preparar café -

-Sentaros.- dijo Maikel mientras preparaba el café y miré dudosa a Lyna -

-Iré al baño.- dijo Lyna levantándose y me senté junto a Nate, hablando un poco -

Hablamos un rato, Maikel nos trajo café y ví que Lyna tardaba bastante.

-Hay... otro baño?- pregunté -

-Claro, al final del pasillo.- dijo Maikel señalando el pasillo y asentí -

Caminé lentamente por el pasillo, ví una luz encendida que salía por una puerta entrecerrada y me acerqué.
Abrí un poco la puerta, encontrándome a Lyna apoyada en el mármol del lavamanos.
Entré lentamente, iba a hacer algo que estaría muy mal, pero lo necesitaba.

-Siento lo que pasó en clase.- dijo sin mirarme todavía - Todo fué culpa mia, entiendo que a partir de ahora me odies...- interrumpí -

-Estás bien?- pregunté directa y me miró a los ojos, solo con una mirada ya me respondió -

-No.- dijo después de unos segundos - Sabes... desde el primer día de clases fuistes mi...- interrumpí acercando mis labios a los suyos, le cogí de la nuca acabando con esa puta distancia que me mataba -

Sí, la besé, no sabía si hacía lo correcto o no, era un gran cambio de actitud, primero la evitaba durante un mes y ahora la besaba...
Pero necesitaba sus labios, necesitaba besarla, sentirla cerca de mi, necesitaba sentir que estaba a mi lado.
Ella siguió el beso, lo necesitaba tanto como yo, me cogió de la cadera atrayéndome a ella, yo rodeé su cuello con mis brazos mientras nos fundíamos en un beso tan esperado, tan necesitado, nunca antes había sentido tanto por alguien, nunca antes había deseado tanto un beso.

-Jennifer, has encontrado el baño?- preguntó Maikel desde el salón y nos separamos sonriendo -

-Sí, ahora voy.- dije separándome - No sé por qué...- dije intentando decir algo -

-Gracias...- sonrió - Sé que... estoy con Maikel y bueno, eso te molesta, pero soy tu profesora Jennifer...-

-Y qué? Entonces sólo seré tu juguete?-

-Claro que no, sólo digo que es algo ilegal... no está bien.-

-Y Maikel? De verdad le quieres?- le miré a los ojos de brazos cruzados, no respondió - Responde porfavor.-

-Llevo mucho tiempo con él y...- apreté la mandíbula, lo sabía, no tendría que haber venido - Pero te hecho de menos.- le miré negando con la cabeza -

-Sabes? Yo pensé que te gustaría, pensé que cambiarías tu opinión y... no sé, tendríamos algo... pero no, sólo he sido otro más de tus juguetes.-

-Jennifer... cuando estoy contigo me haces olvidar los problemas, me siento segura a tu lado, me siento bien, me gusta cómo me miras, me encanta tu sonrisa, pero sigo siendo tu tutora.-

-Si sintieras todo eso por mi, te daría igual lo que fueras, y te arriesgarías lo que fuera por estar a mi lado.- desvió la mirada -

-Dame un tiempo.-

-Un tiempo? Para qué?-

-Necesito pensar las cosas...- suspiró pasando su mano por su pelo -

-Pues no tardes demasiado.- salí del baño y fuí al salón - Vamos a ver la moto?-

-Claro, vamos.- dijo Nate con una sonrisa y salimos afuera - Corres?- preguntó frotando sus manos por el frío -

-Sí... tú?-

-Corría, pero tuve un accidente y supe que era... demasiado peligroso.- desvió la mirada -

-Yo también tuve un accidente.-