Cap. 9

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-Le gusto a todas las de este edificio.-

-Egocéntrico.- rodé los ojos y se acercaron su panda de amiguitos fortachones -

-A quién tenemos aquí...- dijo el castaño mirando de arriba a abajo mientras se mordía el labio -

*Pov Lyna*

He de decir que no se tomó bien lo del repaso, si cara nostraba fastidio y molestia.
Pero yo lo hacía por su propio bien, no porque quisiera joderla.
Dejé los libros en mi mesa del despacho, me senté en la silla con un suspiro y saqué mi horario.
Clase en... aquí. Aula 102.
Cogí los libros necesarios y salí del despacho cerrando con llave por si a algún gracioso se le ocurría entrar. Evidentemente.
Caminé hacia el aula 102, no había nadie por los pasillos, era todo tranquilo...
Al llegar, entré y todos corrieron como animales a sus sillas.
Seriamente dejé mis cosas sobre la mesa y observé a una chica extraña, estaba cabizbaja, como si tuviera algún tipo de depresión.
Sus ojos miraban tristes al suelo, como si acabaran de darle una paliza o de haberle dicho cierto tipo de comentario ofensivo.
Expliqué el primer temario y ñuse algunos ejercicios.
Dudé unos segundos si hacerlo o no, pero pensé que sería mejor hacerlo a final de clase.

*Pov Jennifer*

Argh, este profesor de tecnologia me cansaba, era gordo, alto, olía a pescado podrido, llecaba unas gafas pequeñas rectangulares, el pelo castaño un poco largo y una barba bastante dejada con algunas canas.
No se callaba, explicaba su vida y todo era demasiado aburrido, así que me puse a hablar con Laura.

-Voy a morir.-

-Vamos Jenn, es interesante.- abrí los ojos como platos -

-Que es interesante? Qué te ocurre?- reí -

-Señorita Vega, fuera de clase.- dijo el profesor retocándose esa mierda de flequillo hacia el lado -

-Qué he hecho ahora?- protesté -

-Vamos a tener problemas si no obedeces.- dijo serio y le miré con una ceja alzada -

-Flipo.- me levanté del sitio, caminé hacia la salida y cerré la puerta de un golpe -

Apenas habíamos hecho 10 minutos de clase, así que ahora tendría 50 minutos para hacer lo que yo quisiera.
Sonreí al pensarlo.
Caminé por los pasillos tranquilamente, cuando ví a un chico pegado a la puerta de su clase.
Tenía el pelo rubio, rapado por ambos lados y la parte de atrás y un buen tupé engominado.
Tenía los ojos marrones oscuros y a decir verdad, era bastante mono.

-También te han hechado?- preguntó acercándose -

-El de tecnología, el señor Yuth.-

-Ese viejo repugnante...- rodó los ojos - Soy Damon.- me tendió la mabo y la cogí apretándola -

-Jennifer.- sonreí -

-Vamos a comprar algo?- preguntó y asentí -

-Cuánto llevas en este colegio?- pregunté mientras caminabamos hacia la máquina -

-Hace tres años, tú eres la nueva verdad?-

-Cómo sabes...?-

-En este colegio todo son rumores...- llegamos a la máquina -

Él se pidió un sandwich y yo otro.
El timbre sonó y nos miramos alarmados.

-Mierda!- grité en un susurro -

-Será mejor que vayamos a clase.- asentí - Nos vemos.- me sonrió y se fué corriendo -

Corrí hacia mi clase, tiré el sandwich, pero mientras corría salió alguien de una clase, choqué con... ella.
Mierda.
Lyna.

-Mierda... lo siento.- dije agachádome a recoger todo lo que había caído -

-No pasa nada, está bien.- le dí todo lo que se cayó -

-Disculpa.- dije sin dejar de mirarle a los ojos como si estuviera hipnotizada -

-No es nada.- me sonrió y me paró el mundo -

-Jennifer Vega.- abrí los ojos alarmada al escuchar la voz del director tras de mi y la cara de Lyna se tornó seria y preocupada -

-Sí?- dije con una sonrisa insegura -

-Cómo que no estás en clase?- me dió algo en ese momento, no podían pillarme y tampoco sabía qué decir -

-Yo...-

-Yo la llamé, necesitaba hablar de unos asuntos.- interrumpió Lyna y le miré MUY agradecida -

-Está bien, en cuanto acabe que vuelva a clase.- me miró unos segundos y se fué -

-Dios... gracias, me ha salvado.- dije en un suspiro -

-Qué hacías aquí?- preguntó con el ceño fruncido -

-Es... me hecharon y...- asintió sonriente como si entendiera -

-Que no se repita.- me advirtió y sonreí -

-Gracias de nuevo.- sonreí y caminé hacia clase -

Al llegar, por suerte, salía el profesor de clase y me dejó entrar sin enterarse de nada.

-Su sonrisa...- suspiré sonriente -

Después de clasesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora