Bajé con Laura y Thomas a los vestuarios y nos dividimos a la hora de entrar al de chicas.
Entramos, habían dos chicas, eran de clase, que al entrar me miraron sonrientes.
Susurraban cosas y reían tímidamente.-Me lo vas a contar ahora?- preguntó Laura de brazos cruzados y miré con el ceñi fruncido a las chicas, haciendo que se sonrojaran -
-Buenos días...- dijo una de las dos que nos miraban y salieron por la puerta -
-Qué les pasa?- pregunté quitándome mi camisa y quedándome en sujetador y Laura me miró asombrada -
-De dónde has sacado esto!?- dijo tocándome los pechos y reí -
-Qué tonta.- dije riendo y conenzaron a entrar chicas, algunas mirándome calientes -
-Será mejor que te pongas la camiseta.- me susurró Laura y abrí la mochila -
Busqué la camiseta y me la puse, era una camiseta blanca, sencilla, me quedaba arrapada, también habían unos pantalones negros, cortos, que me marcaban bien el trasero y eran arrapados también.
Me quedaba bastante bien.
Subí con Laura al pavellón donde haríamos ginnasia y varios babosos se nos acercaron.
Laura tampoco estaba mal.
Tenía sus curvas y no era para nada fea.
Pero le costaba coger confianza.
Hicimos la clase de gimnasia y de camino al vestuario, alguien tocó mi culo.
Me giré bien molesta y me encontré con un chico forzudo y alto.
Pero me daba igual, le solté tal bofetón que me dolió la mano.
Caminé rápidamente al vestuario y entré antes de que me hiciera algo.
Hablamos un rato en el vestuario con las demás chicas y subimos a acabar las clases que faltaban.
Últimamente estaba en mi mundo, las clases se me hacían más aburridas de lo normal y sólo pensaba en Lyna Brooks.
Joder, me estaba pasando algo, y no podía ir a bien.
Cuando acabaron las clases me despedí de Laura y Thomas y volví a la librería a esperar a Lyna.
Pero me encontré con algo peor que eso.
Era... era ella hablando con el director, él parecía coquetear, pero a ella no lograba verle el rostro.
Me apoyé en la pared de la librería esperando a que acabaran de hablar y revisé todas mis uñas.
Escuché unos tacones acercarse, esos tacones...
Levanté la vista encontrándome con una Lyna disgustada.-Pasa algo?- pregunté preocupada -
-No.- contestó seca y me llevó a los estantes de libros - No es nada.- dijo intentando olvidar algo -
-Si tú lo dices...- me encogí de hombros -
-Toma, hay que ordenar estos.- me dió unos cuantos libros y ella se cogió otro montón -
Busqué los apartados y los fuí colocando poco a poco.
Ya me quedaba el último y cuando fuí a colocarlo en el sitio vacío ví a Lyna de espaldas, joder, era preciosa hasta de espaldas.
Se ponía de puntillas para llegar a un sitio alto del estante, era tierno.
Se dió la vuelta y coloqué rápidamente el libro.
Pasamos la tarde colocando libros y ordenando.
Era bastante aburrido, pero cruzábamos miradas de vez en cuando.-Bien, ya está.- dijo suspirando - Gracias de nuevo.- dijo con una sonrisa -
-No es nada.-
-Vamos a comer algo? Para compensar el esfuerzo?- qué!? Me estaba invitando a comer!? -
-Ah.... claro, claro, sí...- sonreí ocultando el nerviosismo -
-Sólo si tú quieres.- asentí -
-Claro, muero de hambre.- rió y asintió -
Caminamos por el pasillo y llegamos afuera.
Yo simplemente la seguí.
Llegamos al aparcamiento, ella paró delante de un mercedes blanco, con los asientos en rojo y algunos detalles en blanco hielo, precioso.-Este es tu coche?- pregunté asombrada -
-Sí... no te gusta?-
-No es eso... es que me sorprenden estos tipos de coche, son preciosos.- sonrió amablemente y abrió el coche con el mando -
-Vamos.- dijo subiendo al coche y subí de coopiloto - Puedes dejarme el bolso allí atrás, junto a tu mochila, porfavor?- asentí y puse su bolso donde ella me dijo, lo dejé con cuidado y al volver noté que me había estado mirando... el trasero -
-Listo.- dije haciéndome la tonta, pero me gustó haberle pillado -
-Gracias...- dijo con un leve sonrojo y arrancó -
-Tienes una hija?- dije observando una foto que había puesta encima del cenicero vacío -
-Ella?- señaló la foto con una niña pequeña con el pelo pelirrojo, y una cara bastante mona, no tendría más de 7 años - Es mi prima, viene a menudo aquí...- le miré sonriente -
-Es muy bonita.- pero no tanto como tú... -
-Lo es...- sonrió mientras conducía - Tienes hermanos?- preguntó parando en un semáforo y mirándome directamente a los ojos -

ESTÁS LEYENDO
Después de clases
Teen Fiction"Desde la primera clase que me dió, supe que nunca antes me había enamorado." A veces un cambio de vida supone muchas conseqüencias, pero Jennifer no esperaba enamorarse. Y menos de su profesora.