Enamorado de la apuesta » n.g. Primera temporada.

Capítulo 2. Date

¿Por qué Nash Grier está sosteniendo mi brazo?

—¿Necesitas algo?-pregunté mirándolo extrañada. Él se levantó y me sonrió.

-Nada en especial, soy Nash, Nash Grier, tú debes ser _____ Mendes ¿no?-preguntó coqueto con su mirada celeste, soltándome el brazo.

-Sí, insisto Nash ¿Necesitas algo?-pregunté apurada, necesitaba entrar a clase, Lily miraba todo desde afuera de la cafetería.

-¿Qué te parece si quedamos en la salida?-dijo el sonriéndome, me miraba con su celeste mirada penetrante, muy irresistible ¿Qué? ¿Me está pidiendo hablar después?

-Yo...em...no lo sé.-dije nerviosa sin saber que responder, él sonrió y se fue.

-Tomaré eso como un sí.-dijo caminando a la puerta.

-Yo nunca dije que sí, Nash.-susurré lo bastante fuerte para que el lo escuchara y se detuviera.

-¿Ah, no?-preguntó mirándome por encima de su hombro, confundido pero sin perder el encanto.

-No.-dije yendo hacia el para ponerme cara a cara lo cual no resultó porqué él era muy alto.

-Normalmente cuando invito a una chica para quedar nunca me responden porque están nerviosas, a todas les pasa lo mismo. -dijo inclinando su cabeza para mirarme.

-Bueno, Nash, quiero que te quede claro que yo no soy como todas las otras chicas.-dije haciendo énfasis en la palabra todas. Él entendió a lo que me refería, a sus apuestas. Sonrió divertido, hipócritamente divertido.

-Eso lo sé y muy bien.-sonrió, le devolví el gesto y camine hacia la puerta de la cafetería dejándolo ahí.

-Te veré en la puerta principal después de clases.-él sonrió y salió para reunirse con sus amigos que lo esperaban afuera de la cafetería. No confiaba en él, no en un apostador. Tenía el presentimiento de que no era más que una apuesta, pero sería divertido seguirle el juego. Todos comenzaron a murmurar pero simplemente los ignoré. Lily me miraba atónita. Entramos a nuestro salón y nos sentamos en los últimos asientos, aún no llegaba el maestro así que probablemente tendríamos sus dos horas libres. Ella se volteó a mí ya que se había sentado en el asiento de adelante de mí.

-Cuéntamelo TODO.-dijo con los ojos abiertos.

-Vamos Lil, lo haz escuchado tú.-dije encogiéndome de hombros.

-¿En serio saldrás con él?-preguntó sorprendida-No olvides lo que dijiste cuando entraste a la preparatoria.

~Flashback~

-Y él es Nash Grier.-dijo mi hermano con su brazo colgado en mis hombros y señalando a aquel chico de hermosos ojos del color del cielo que reía con sus amigos en una mesa en la cafetería. Me gustaba, o bueno, me atraía. Apenas iba a decir algo cuando Jack Gilinsky, quien traía a su hermanita de la misma manera que Shawn a mi, habló.

-Y él es un "apostador".-dijo mirándolo.

-¿Apostador?-pregunté confundida, no sabía a que se refería.

-¿Qué no sabes que es un apostador, hermanita? Un apostador es un...-dijo Shawn pero yo lo interrumpí, claro que sabía lo que era.

-Si sé que es un apostador, Shawn. Me refiero a que te refieres exactamente. ¿Apuestas de qué?-pregunté mirando a Jack, no podría ser tan malo, ¿apuestas de fútbol? ¿trabajos? ¿Deportivas? Pero lo que dijo jamás me lo esperé.

-De chicas, _____.-dijo mirándonos a ambas serio-Hace apuestas con sus amigos, todos ellos que están sentados con él, Cameron Dallas, Carter Reynolds, Taylor Caniff y Matthew Espinosa son los apostadores de la escuela.-Shawn me tapó los oídos, que ridículo hermano mayor.