Enlazados

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Sábado 9 de septiembre, por la noche

Victoria y Lorenzo corren hacia mí cuando suelto un pequeño grito que se oye sobre la potente música. Creo que me rompí el pulgar, pero vale la pena. Él se ve más adolorido.

—¿Todo bien?

Es Victoria. Lorenzo aparece junto a ella, coloca sus manos en mis hombros.

—Sácalo de mi vista.

Victoria asiente y aleja a Theo de manera brusca, pero lo merece. Lo merece totalmente.

—¿Te encuentras bien?

—Creo que me rompí el dedo.

Toma mi mano entre las suyas y la examina.

—Tenemos que ir al hospital.

—¿Qué demonios sucedió? –exclama Vicky, el alcohol le está haciendo efecto.

—Pasa que Theo es un idiota.

Ambos ríen al unísono, quiero golpearlos a ellos también. El espíritu golpeador sigue en mí.

—¿Lo golpeaste?

Asiento.

—Los puñetazos se dan sin colocar el pulgar en el centro, Rocky.

Lo miro mal y él besa mi frente en un vano intento de calmarme.

—Tenemos que ir al hospital, ¿está bien si nos vamos?

Victoria asiente y me mira preocupada.

—¿Necesitan que los acompañe?

—No, Lorenzo puede llevarme. ¿No?

Él asiente y Vicky me dedica una sonrisa que me recomienda todo menos ser una santa.