El jardín - CAPÍTULO 10.

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__ POV'S

Salí de la habitación, dispuesta a sacarle una foto a Justin Bieber para enviársela a mi mejor amiga Cindy.
Llegué a la gigantesca piscina y lo vi sin camisa y con traje de baño.

De inmediato decidí mensajera a Cindy.

— ¿Qué haces __?, ¿me estás sacando una fotografía? — dijo la voz que menos quería escuchar

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— ¿Qué haces __?, ¿me estás sacando una fotografía? — dijo la voz que menos quería escuchar.

Maldición, Justin me descubrió.

— No, no te estoy sacando ninguna fotografía.  — dije nerviosamente.

— El flash de tu celular no dijo eso. Soy famoso __, sé cuando me sacan fotos.

— Piensa lo que quieras Justin. — dije y  caminé hacia la habitación.

— ¡Ahora tú pareces psicópata! — gritó y se rió.

Qué vergüenza, aunque no quiera admitirlo, él tiene razón. Parezco psicópata sacándole fotos. Creo que soy una tonta.

Apagué mi Iphone y me dormí, esta vez tuve la cautela de cerrar la puerta con seguro para que nadie entrara.

Dormí plácidamente, hasta que sentí unos fuertes golpes en la puerta.

— ¿Quién es? — dije gritando desde la cama.

— Soy Yovanna. — dijo mi prima desde el otro extremo de la puerta.

— Vete perra. — dije con sueño.

— Levanta tu trasero y ven a cenar. No haz comido nada desde que llegaste.

— Okey, ya voy. — dije parándome de la cama y buscando entre mis maletas un polerón, ya que tenía frío.

Me levanté rápidamente solo porque moría de hambre y lo que menos quiero es encontrarme a Justin, pero la comida me importa más.

Salí de la habitación y busqué a los chicos, hasta que llegué a un cuarto enorme que tenía un lindo comedor de vidrio  de ocho sillas.

— Llegó ___, ahora podemos comer. — dijo Justin, quién me miró — pero antes, debemos darle las gracias al señor.

¿Qué mierda? ¿Íbamos a cenar o nos transportaríamos a la iglesia?

— Gracias Dios por todos estos alimentos que tenemos en la mesa, y por sobre todo, gracias por regalarnos la llegada de ___, amén. — dijo Justin.

Yovanna y su novio abrieron los ojos y bajaron las manos y empezaron a comer. Yo, en todo momento estaba expectante. Justin es chico problema, por lo que sé, Khalil es drogadicto y Yovanna es media puta ¿y todos se resguardan en Dios? ¿Wtf?

Dejé mis pensamientos de lado y me dediqué a comer.
Lamentablemente, todo lo que escuchaba era a Justin y Khalil hablando de "música basura" como la suya.

Terminamos de comer y mis planes eran ir a dormir a la habitación, pero la voz de alguien me interrumpió.

— __, Justin dijo que fueras al jardín. — Dijo Khalil, quien me miraba.

— ¿Qué? ¿Por qué tengo que ir? — pregunté confundida.

— No tengo idea, pero es urgente.

Incrédulamente fui al jardín, no quería ir, pero si me negaba, me quedaría con la incertidumbre y Justin seguiría molestándome.

Llegué y lo vi sentado en el pasto, cerca de la piscina con una jaula de aves.

— ¿Qué quieres Justin? — dije altaneramente.

— Ven, tengo algo para ti. — dijo y me hizo señas para que fuera a sentarme con él.

Seguí sus indicaciones con pocas ganas y tomé asiento en el pasto.

— Ellos son Dan y Serena, Colibríes o Picaflores alemanes. Su especie es la única en aves que pueden volar al revés. — dijo señalando a los pequeños pajaritos en su jaula.

— ¿Y qué tengo que ver yo con los pajaritos? — dije confundida.

— Esta tarde, cuando estábamos en este mismo lugar, dijiste que me darías tu número cuando los pájaros vuelen al revés, y estos dos lo hacen. — sonrió.

Hijo de su madre. No puedo creer que hizo todo esto para tener mi número.

— Podías haber conseguido mi número con Yovanna, los pájaros no eran necesarios. — dije con asombro.

JUSTIN POV'S

Maldición, pasé toda la puta tarde contactando gente para tener estos pájaros y no se me ocurrió pedirle el número de ___ a Yovanna, soy un estúpido.

— Me gustan las cosas difíciles, no me iba a ir por el lado fácil. — dije un poco nervioso.

— ¿No se te ocurrió pedírselo a mi prima, cierto? — dijo ella levantando una ceja.

— No, soy un idiota. — dije tapándome la cara con las manos.

Ella no podía parar de reír, y me encantaba, a pesar que en ese momento de burlaba de mi.

— Tratos son tratos. Préstame tu teléfono y te doy el mío. — dijo ella.

Le pasé mi celular, sin antes desbloquearlo con mi huella del dedo.

— Listo, y creo que Sofía Richie necesita verte. — dijo, se paró y se fue.

Quedé pasmado. No sé a que se debe esa reacción. Desbloquee mi teléfono y veo una nota que dejó en mi celular.

"Deberías ser más inteligente y darte cuenta que no soy una "cosa", como dijiste tú. Gracias por tomarte el tiempo y buscar las aves, pero no te daré mi número.

PD: Cuando escribí el mensaje de arriba, una tal Sofía Richie te envió cinco mensajes. Escríbele, la chica se puede enojar".



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