¡ALÉJATE DE NOSOTROS! [JB&TÚ]

Monstruo - CAPÍTULO 33.

📍Sister Emmanuel Hospital. Miami, Florida, USA.
8:42 am.

__'s POV.

— Tienes que comerte todo __. — Regañó la enfermera. — No puedes salir de aquí con el estómago vacío.

— No tengo hambre Grace.

— ¿Te sucede algo pequeña? — Preguntó mientras acercaba la bandeja con el desayuno.

— Tengo nervios de salir de aquí y tener que convivir de nuevo con las reglas de mis padres. — Suspiré.

— ¿Tienes algún problema con tus papá? — Grace se sentó a los pies de la camilla. — Se ven muy amable. — Sonrió.

— No quieren que esté cerca de Justin. — Dije tristemente.

— ¿Estás de novia con él?

— No. Solo somos amigos. — Sonreí recordando todo lo que Justin ha hecho por mí estos últimos días.

— El chico te quiere __. — Habló Grace. — Lo noté desde que vi su cara de desesperación cuando te vio entrando ensangrentada a urgencias.

— Somos muy distintos. — Recordé. — Él tiene una vida muy pública.

— A partir de ahora, tú vida también lo será. — Dijo Grace mientras acariciaba mi pierna.

— No sé que haré Grace. — Tapé mi cara con el almohadón. — Mi vida ha cambiado mucho en Tres semanas.

— ¿Tus padres te prohíben verlo por su reputación?

— Eso creo. — Contesté.

Sentimos ruido en el pasillo y nos quedamos en silencio. Mis padres ya habían llegado a recogerme y no quería que escucharan nada de lo que estaba hablando con Grace.

— Buenos días preciosas. — Saludó mi hermano mayor.

— Compórtate Francisco. — Habló mamá.

— ¿Qué te pasó en la cara Fran? — Pregunté alarmada al ver una marca morada en su ojo derecho.

— Tropecé con la cama del hotel. No es nada grave.

Grace me dedicó una mirada sospechosa y observé a Zara, quién nerviosamente comenzó a hablar.

— ¿Cómo amaneciste hermanita? — Preguntó Zara cambiando rápidamente de tema.

— Me siento mejor al querer salir hoy de aquí. — Dije. — Solo que extrañaré a Grace. — Abracé a la enfermera.

— No serás la única que la extrañará. — Miró coquetamente Francisco.

— Que lamentable es tu forma de coquetear hermano. — Se burló Zara.

— Lo lamentó chicos, pero debo irme a ver a otro paciente. — Habló Grace. — Te extrañaré pequeña muñeca. — Me abrazó.

— Tenemos que estar en contacto Grace. — La miré.

— Claro, te daré mi número para que salgamos mientras estés en la ciudad.