Nuevos Sentimientos

12: Tonterías

Como era costumbre Jaeseok se desperto primero, admiro al niño dormido en sus brazos. Se sentía bien, esa sensación cálida quería tenerla todos los días.

Beso la frente del menor logrando que este despertará de a poco. Le sonrió dulcemente al verlo tallarse los ojos, su corazón palpitante hizo que se diera cuenta que le gustaba el niño que se encontraba acurrucado en sus brazos.

-Buenos días hyung -Dijo adormilado el menor despertando de a poco.

-Buenos días Jibeom.

El menor abrió sus ojos encontrando la dulce mirada que le regalaba el pelirrojo, un pequeño sonrojo invadió su rostro. Había que admitir que estaba enamorado del chico que lo envolvía en sus brazos.

-¿Ya debemos ir a la escuela?.

-Así es.

-No quiero.

-¿Por qué no?.

-No quiero ver a mi hermano.

-Tu dongseng se preocupara mucho sino te ve, estoy seguro que tus padres lo llamaron preguntando por ti.

-No tengo uniforme.

-Youngtaek puede prestarte un uniforme. Son casi de la misma talla.

-Esta bien.

El menor suspiro, los dos se levantaron. El peli negro toco la puerta de la habitación del menor, al ver que no respondía entro encontrándolo dormido como roca. Saco dos uniforme de su armario y se acercó al menor moviendolo con delicadeza.

-Bebé hay que despertarse, el sol ya salió y debemos ir a clases.

La dulce voz con la que hablaba Jaeseok solo logro que el menor se removiera en su cama.

-Bebé.

-Hyung, tengo sueño.

-Bien, te dejo solo un rato más y volveré.

Sonrió dejándolo dormir 5 minutos más, más que eso no lo dejaría dormir. Vio como Youngtaek se acurrucaba más en su cama reprimiendo una risita. Colocó el uniforme en el respaldo de la silla del escritorio donde se encontraba su ordenador y luego salió con el otro uniforme. A fuera de la habitación lo esperaba Jibeom. Lo guió al baño y le entrego el uniforme.

Jaeseok se dirigió a la cocina preparando el desayuno, uno donde los menores pudieran disfrutar al 100%, unos cuantos minutos después y una voz femenina cantando entro a la cocina.

-Buenos días Jaeseok.

-Buenos días Noona.

-Huele bien.

-Falta poco y termino.

-Entonces pondré la mesa.

Eunbi empezó a poner la mesa, escucho unos pasos y una sonrisa apareció en su rostro pensando que era su hermano pero se llevo una gran sorpresa al ver que no era su pequeño hermanito.

-Mmmm Jaeseok! ¡Estoy soñando o hay un niño en mi casa!.

El nombrado, con el desayuno listo, se acercó. Sonrió automáticamente al ver a Jibeom con el uniforme.

-No estas soñando, él es Jibeom, lo traje cuando estaban todos durmiendo.

-¿Tengo que llamar a la policía por secuestro a un menor?.

-Vine por cuenta propia -Dijo tímido Jibeom tratando de defender al mayor.

La sonrisa de Jaeseok crecía más al ver la timidez del nuevo invitado. Lo cual hizo reaccionar a Eunbi. Quien conocía perfectamente aquella mirada del peli negro, le gustaba el menor y viceversa, lo sabía.