Las tropas de Ryou que aun podían moverse se reunieron. Frente a ellos había un poderoso ejército enemigo, con más de 150 combatientes del pico del rango Guerrero, y que también contaba con al menos 50 figuras del rango Gran Guerrero. Estos más de 200 combatientes eran sin duda las fuerzas más poderosas de la tribu Plumas Sagradas y sus tribus subsidiarias cercanas.
Por otro lado, debido a las bajas causadas por el ataque sorpresa, Ryou contaba con tan solo 120 combatientes disponibles para la batalla, de los cuales apenas unos 35 eran del rango Gran Guerrero. La diferencia de poder entre ambos ejércitos era notable, y eso sin mencionar que después del ataque sorpresa la moral de los enemigos estaba por las nubes. Mientras que los soldados de Ryou tendrían suerte si lograban encontrar sus armas y armaduras en medio del caos causado por el fuego en su campamento.
Fue en este momento desesperado, cuando Ryou recordó una situación similar que tuvo la suerte de observar como entidad divina hace decenas de miles de años atrás.
"Eso fue hace mucho tiempo, hace casi 42500 años. Cuando el Imperio Zhou aún no se había consolidado como tal, el genio y estratega militar, Sun Wu, vivió una situación similar a esta" Recordó Ryou con nostalgia.
Sun Wu fue una de las personas de las que más aprendió Ryou sobre el arte de la guerra y el combate a gran escala. También sobre estrategias y tácticas de guerra. Este genio militar sin igual conquistó gran parte del continente bajo las órdenes del Rey de Pirea, quien luego se convirtió en el primer emperador de todo el continente, al fundar el Imperio Zhou.
Luego de retirarse como estratega militar con los más altos honores, Sun Wu se convirtió en el sabio que escribió el famoso código de la guerra, los eruditos de la actualidad aún estudiaban sus enseñanzas con empeño. Ryou recordó algunas frases aleatorias de este antiguo código:
"La oportunidad de asegurarnos contra la derrota está en nuestras propias manos, pero la oportunidad de derrotar al enemigo la provee el mismo"
"Quien desea luchar debe primero saber el costo de hacerlo"
Después de analizar la situación por un breve instante, Ryou decidió poner su plan en acción y usando una técnica de viento que amplificaba su voz, gritó:
"Mi nombre es Sumeki Ryou, Comandante General de este ejército"
Viendo la tenue respuesta del enemigo, continuó con su potente voz:
"Hoy podemos elegir masacrarnos, y muchísimas personas morirán; sin duda ningún bando saldrá indemne. O podemos elegir una opción más razonable para todos"
Ryou soltó esas palabras, ante la burlona mirada de sus enemigos.
Algunos de los combatientes enemigos comenzaron a burlarse de Ryou en voz alta.
"¿Comandante General? ¡Haha! Pero si solo es un niño bebe leche"
"¡Haha! El mocoso debe tener miedo y ahora quiere negociar"
"Desde el momento que entraste en nuestro territorio, ni sueñes en salir con vida de aquí hoy"
Ryou sonrió con amargura, y continuó:
"En lugar de provocar muertes innecesarias ¡Decidamos esto en un duelo! El combatiente más poderoso de su ejército se enfrentará al nuestro"
"Ha..." Una exclamación baja pudo escucharse en el ejército enemigo.
Un robusto personaje salió entre la multitud enemiga, tenía una gran estatura y una cabeza calva con barba marrón. Este hombre de mediana edad habló:
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Divine Cruelty
FantasyUn joven de 13 años es forzado a explorar unas ruinas antiguas, cuando encuentra una poderosa luz divina que lo convierte en un esclavo de los cielos por toda la eternidad. Cientos de miles de años después, logra escapar de su cruel destino, regresa...