Capítulo 101: Los Esqueletos del Bosque Ruan

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El rango de Maestro Espiritual era un poco distinto al resto, ya que estaba dividido en solo 3 niveles, en vez de 5 como los anteriores. Una vez que se superara el tercer nivel, uno se convertiría en un Gran Maestro Espiritual, cuyo rango tenía tan solo dos niveles.

Algunos ignorantes sobre el asunto incluso asumían que el rango de Gran Maestro Espiritual no existía y simplemente llamaban a todo Maestro Espiritual desde nivel 1 al 5. Por supuesto que esto no era así, ya que había grandes diferencias entre ambos rangos.

Un Maestro Espiritual tenía una esperanza de vida de entre 200 y 300 años de edad, lo cual era mucho más que la de un Guerrero Espiritual. Además podrían crear Marcas Espirituales, las cuales normalmente se usaban para marcar a sus discípulos o familiares cercanos, y así mantener cierto control en su seguridad. Esta habilidad se ganaba de forma innata con el tiempo, similar a como un Guerrero Espiritual desarrollaba Volverse Uno con el Entorno o también los Pasos Lunares.

Pero lo más interesante de este rango, además del gran incremento de poder, era la posibilidad de poder reconstruir los órganos internos de uno y también las extremidades. Incluso si un Maestro Espiritual perdiera un brazo, después de algún tiempo de meditación podría hacer crecer uno nuevo. Esto era posible debido al perfecto control sobre el cuerpo de uno que se lograba a nivel celular, y así casi cualquier parte podría ser reconstruida con el suficiente tiempo.

Pero progresar en este rango no era una tarea fácil. Esto quedaba demostrado cuando incluso los poderosos Condes del Ducado Kherguita estaban atrapados en este rango de cultivación desde hace muchas décadas. De hecho con excepción del Gran Ancestro de la familia Yuan, se rumoreaba que no había nadie en todo el ducado que superara este rango de cultivo.

Por esta razón se decía que un Maestro Espiritual era una persona capaz de levantar fuertes vientos y mareas con un simple movimiento al azar de su mano. Estos personajes eran el verdadero pico en el Ducado Kherguita y la mayoría de ellos formaba parte de la nobleza con los títulos de condes o vizcondes. Por supuesto que esto era únicamente el conocimiento normal sobre el mundo común que era conocido por todos, ya que las Sectas Ocultas también tenían muchos Maestros Espirituales entre sus ancianos.

Por último había una importante razón por la cual casi nadie podía superar este rango. Esta razón también era la causante de que sea un rango de solo 3 niveles.

Esto era porque para romper en el siguiente rango, un Maestro Espiritual además de refinar grandes cantidades de energía, debía abrir todos los puntos de acupuntura de su cuerpo.

Esto era considerado una tarea colosal que muy pocos en cada generación lograban completar satisfactoriamente. Para ser exactos abrir los 361 puntos de acupuntura era casi imposible sin la ayuda de un Gran Maestro Espiritual experimentado que guie el proceso. Por lo cual muchas personas talentosas y ricas quedaron atrapadas en el nivel 3 de Maestro Espiritual para toda su vida. Pero incluso llegar a este nivel no era una tarea sencilla.

Ryou estaba pavoneándose por su castillo, y no estaba preocupado por este asunto.

Antes de pensar en abrir todos los puntos de acupuntura, sabía que necesitaba grandes cantidades de recursos para poder progresar usando su técnica de cultivo Deidad Suprema. Pero había gastado la mayoría de sus reliquias para lograr romper en el rango de Maestro Espiritual, y aunque usara todas las que le quedaban posiblemente no lograría romper en el nivel 2. Además ya había consumido una importante cantidad de reliquias Demoniacas en poco tiempo, provenientes de la caja de recursos que encontró en las cuevas, y su cuerpo empezaba a generar una resistencia natural ante estas.

"¡Debo conseguir una nueva fuente de recursos de cultivo!" Concluyó.

Ryou tenía varias ideas para lograrlo sin tener que abandonar el ducado, por lo cual después de analizar los pros y las contras, tomó su decisión.

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