Capítulo 119: El fin de la batalla

1.2K 173 31
                                    



La espada del conde Nam cayó en vertical hacia Naomi con enorme potencia. Este era un golpe que podría partir en dos incluso a un Maestro Espiritual, y por supuesto que alguien del nivel de Suki Naomi no tendría oportunidad de sobrevivir a semejante ataque.

~ ¡Pam! ~

Dos palmas doradas atraparon la hoja del conde Nam Kuan, a escasos centímetros de la cabeza de Naomi.

Una gota de sudor frio calló por una de sus mejillas. Aunque no sabía exactamente que estaba pasando, Naomi comprendió de inmediato que se había salvado de una muerte segura en este momento.

"Parece que no lo has tenido fácil..." Mencionó Ryou mientras canalizaba su Palma de la Deidad para materializar esta poderosa técnica que había logrado detener el golpe del conde. Y esta vez, él además había creado dos palmas simultáneamente para detener este ataque asesino.

Naomi lo miró con ojos llenos de emoción y agradecimiento ¡Había sido completamente salvada por Ryou otra vez!

Ella sabía que con su señor aquí, su parte en esta guerra ya estaba cumplida y que podría considerar que su misión en el frente norte fue un éxito. Esta sensación de objetivo cumplido le quitó una enorme carga psicológica de encima. Y a raíz de esto; su debilitado cuerpo no resistió más y cedió ante el cansancio, desmayándose de inmediato con una ligera sonrisa en su rostro.

Por otro lado, el Conde Nam estaba entrando en pánico. Si su objetivo principal estaba presente en este lugar ¿Qué había sucedido en el frente del este exactamente?

¡Además no podía remover su poderosa espada! Estas dos palmas doradas sujetaban la misma con fuerza e incluso comenzaban a doblar su hoja.

Como Maestro Espiritual nivel 2 no creía que nadie por debajo del rango de Gran Maestro Espiritual pudiera lograr semejante hazaña. Su espada quizás no era tan poderosa como la de la joven comandante enemiga, pero seguía siendo una poderosa arma de nivel Experto. Pero a pesar de esto la otra parte logró atraparla desde su hoja y ahora no podía moverla ni un centímetro.

Además la mirada fría y desdeñosa del joven frente a él lo perturbaba en gran medida. Esos ojos lo observaban como si fuera una mera partícula de polvo que pudiera ser barrida fácilmente en cualquier momento.

El conde Nam sintió miedo verdadero por primera vez en esta batalla. O mejor dicho, por primera vez en muchos años.

Ahora la única solución a su situación sería soltar su arma, pero... ¿cómo podría hacer semejante cosa? ¿Si le regalaba su espada a su oponente no sería lo mismo que cortejar a la muerte?

Ryou mostró una ligera sonrisa y, como si supiera lo que la otra parte pensaba, dijo:

"¡Piensas demasiado bien de ti mismo! Pero no tendrás la oportunidad de soltar tu espada para atacarme ¡Porque este juguete no es de mi interés!"

Luego de dejar estas palabras, las dos manos doradas brillaron con intensidad.

~ ¡Crack! ~

La espada de nivel Experto se partió en dos dejando totalmente boquiabierto al horrorizado al Conde Nam.

¡Su mejor espada había sido destruida fácilmente por este joven! ¡Y ni siquiera había tenido que utilizar la ayuda de otra poderosa arma para hacerlo!

"Esto... Podemos hablar para alcanzar una solución pacifica... Retiraré mis tropas restantes y regresaremos a nuestro condado de inmediato..." Musitó el conde Nam mientras retrocedía con miedo en sus ojos. Él sabía que en su estado actual no tendría ninguna oportunidad de vencer a este enemigo. E incluso si estuviera en perfectas condiciones todavía tendría un duro combate contra semejante monstruo, y posiblemente perdería igual.

Divine CrueltyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora