Laberinto de amor.

Capitulo 22

Me muerdo el labio. Estoy nerviosa. Osea Peter le dijo a ella que yo soy la amante, ¿pero hasta cuando? Megan lo mira con dolor y odio. No dice nada. ¿Cómo va decir? Ella se acaba de enterar que el hombre con quien se va casar, le es infiel.

— ¿Desde cuándo me engañas con esta...., ella.?

— Megan, no tiene caso.

— ¡Lo tiene! Me merezco una explicación. Me acabas de decir: que tienes a esta mujer como tu amante. Nos vamos a casar Peter......

No sé que rayos hacer. Me da tristeza ella. No se merece algo así. Peter me voltea a ver y me pide con la mirada que me vaya al cuarto. Le hago caso, esta vez no quiero escucha ni ver como se pelea con su novia y después se reconcilien.

Llego al cuarto y me siento en la orilla de la cama. Escucho los gritos de ella. Como lo trata y le dice: que es el peor hombre que haya conocido. No escucho la voz de Peter. Él se deja tratar. Después de tantos gritos un enorme silencio. Estoy nerviosa  puede que se estén besando.

De pronto la puerta se abre la Peter entra muy serio. Me fijo en su mejilla izquierda y la tiene muy roja.

— ¿Qué ocurrió? — decido preguntar.

— Lo que tenia que pasar. — dijo caminando hacia el ropero.

— Peter......

— Terminé con ella. No hay boda. — voltea a verme. — No creas que lo hice por ti. — auch. — No quise seguir con ella, porque no podía seguir engañándola y engañándome. Yo a Megan le tengo cariño, pero no la amo.

— ¿Entonces por qué le pediste matrimonio? 

— Porque requería tener a alguien a mi lado, pero me di cuenta que no estoy preparado para casarme o tal vez, no con ella.

— ¿Qué pasará entre nosotros?

— Todo sigue igual. Eres mi amante. No vayas a creer que, porque terminé con Megan voy a querer algo contigo.

— No te preocupes no lo creo. — digo con amargura. — pero también dijiste que no seria tu amante.

— Es la verdad, por ahora serás mi amante, pero no lo vas hacer para toda la vida. Eso de que tu madre mintió, no te creo. — lo sabia — tengo pruebas de tu infidelidad, Mariana.

— ¿Pruebas? Peter, mi madre te mintió, porque me odia. Yo nunca te fui infiel, ni te engañé.

— Sigue mintiendo. Tal vez decir tantas mentiras ya tú te las crees. ¿Dime, Lali? ¿Te gusta ir de cama en cama? Porque has tenido unos cuantos novios y con todos terminas.

— Pero qué mierda....

— Vamos a ver. Has tenido como unos cuatro quitándome a mi eso es obvio. ¿Dime, Lali. ¿En verdad eras virgen cuando te acostaste conmigo?  Tal vez fue una de tus grandes actuaciones.

— No te permito..... — me levanto, pero me hace callar tomándome de los brazos.

— ¿Qué no me permites? ¿Dé ser sincero? ¿Decirte la verdad? No te hagas la mujer buena Lali. Eras una loba vestida de cordera. Te gusta jugar con los hombre y después botarlos, eso hiciste conmigo. Tal vez los terminabas cuando no sentías deseo....

— ¡Basta!..... Déjame Peter...

— No te vengas hacer la buena conmigo. Yo sé la clase de mujer que eres. — me suelta bruscamente y vuelvo a caer a la cama.  — Tu no mereces que te amen, porque sos una víbora.

— ¡Basta! No puedo creer que mi madre te haya hecho esta persona. ¡Yo no hice nada! — Grito furiosa y con lágrimas que caen si parar. — ¡¿No comprendes que mi madre te mintió?! No puede haber pruebas de algo que nunca pasó.....

Peter camina hacia su maleta y comienza a busca algo. Saca un sobre viejo. Y me lo tira. Miro hacia abajo, y veo muchas fotos. Mi mano tiembla a tomarlas y al verla suelto un jadeo. Son unas fotos donde Benjamín y yo estamos en la cama. Yo estoy desnuda y tapada con sólo una sábana y Benja abrazándome. Todas las fotos son iguales y en diferente ángulos. Las manos me tiemblan.

— ¿Ahora seguirás negando? Sos vos y él en la cama. ¿Tan cansada te dejó que no te diste cuenta que te tomaba fotos?

— Yo....., yo no recuerdo esto. Benjamín y yo nunca....

— Deja de mentir. Con pruebas en tus manos, sigues con la mentira.

Él niega y sale furioso del cuarto. Yo no paro de llorar. ¿Cómo es posible? Yo...., yo nunca estuve con Benjamín ...... Yo.... No recuerdo esto, no recuerdo haber amanecido desnuda en una cama...... Me entran arcadas. Corriendo al baño comienzo a vomitar y llorar. Cuando no puedo más. Me abrazo las pierna y lloro, por no recordar cómo pasó eso....... ¿Que rayos pasó?