No deberíamos. {Paulo Dybala}

59.

Narra Paulo: 

Después de la discusión de los hermanos Messi y de que Delfi se fuera llorando del patio, el ambiente quedó algo tenso y silencioso. 

Ninguno de los chicos del plantel queríamos decir algo, por las dudas de que ello desencadenara otra discusión. Pero dicho silencio lo rompió el Kun, quien era el indicado para hablar.

 -¿Te diste cuenta que sos un boludo, no?- Estaba serio, como pocas veces lo había visto. 

Lionel, aún con su hijo mayor en brazos alzó las cejas incrédulo.

-¿Yo? ¿Ahora la defendés a ella?

-No defiendo a nadie, los dos son mis amigos, pero esta vez te pasaste Leo- Le dijo. 

-¿No te das cuenta que se fue llorando para dar lástima y que todos estuvieran de su lado?- Preguntó mi cuñado y me tuve que contener para no gritarle nada de lo que después pueda arrepentirme. Me levanté de la silla y antes de que pudiera salir del lugar, el dueño de casa me interrumpió.

-¿A donde vas?- Me preguntó de mala forma. 

-¿A donde te parece?- Le respondí yo. Nunca creí que podría llegar a responderle así a mi ídolo, quien ahora también es mi cuñado y mi amigo, pero de tan solo pensar en la forma que había tratado a mi novia unos minutos antes me daba bronca. 

-¿No te das cuenta que ella está así por vos?- Me retrucó. 

-¿Por mi? Creo que el que le dijo cosas que la hicieron llorar fuiste vos. Permiso- Dije saliendo del patio. 

-Eu, joyita esperame- Sentí que me dijo el Pocho a mis espaldas.

-Si, bancá- Dijo también el Kun. Y ahora los tres subimos las escaleras para ir a ver a Delfi.

Desde afuera de la habitación se sentían sollozos y a mi sinceramente me partía el alma verla así. Los tres nos miramos sin saber bien que hacer. 

-Golpeá vos- Me susurró el Pocho. 

-¿Por qué yo?- Dije.

-Porque sos el novio- Respondió esta vez el Kun de manera obvia. 

Sin decir una palabra más di dos golpes en la puerta.

-Quiero estar sola- Se sintió una voz quebrada del otro lado.

-Soy yo, Delfi. ¿Me abrís?

-No, Pau, dejame sola. Por favor- Dijo ella. 

-Abrinos pelotuda- Dijo el Kun interviniendo. Lo miré mal, porque se supone que la íbamos a tratar con cuidado- ¿Por qué me miras así?- Me susurró.

-Tratala bien.

-Yo la trato bien... esa es mi manera de demostrar cariño- Se encogió de hombros. 

-Dale Delfi, abrinos- Habló esta vez el Pocho.

Un par de segundos más tarde, la puerta se abrió dejando ver a una Delfi con los ojos y la nariz completamente rojos y lagrimas cayendo por sus mejillas. Creo que me partió el corazón verla así. 

Ninguno de los tres dijo ni una palabra pero yo me acerqué a ella y la abracé, ella me correspondió el abrazo rápidamente ocultando su cara en mi cuello.

-Bueno, che, me voy a poner celoso- Habló el Kun y ella rió un poco para luego soltarme y abrazarlo a él. 

El Pocho cerró la puerta a sus espaldas y se sentó en uno de los sillones que tenía la habitación, seguido por el Kun. Mientras yo me senté con mi novia en su cama, abrazándola por los hombros.

-¿Estás mejor?- Le preguntó el Pocho.

Ella negó.

-No... no entiendo como es que Lionel pudo haberme dicho todas esas cosas.

-Ya te va a pedir perdón, quedate tranquila- Le dijo Sergio. 

-Es que no pasa por si me pide perdón o no, pasa por todas las cosas que me dijo. ¿Que no quiero a mis sobrinos, que necesita otra madrina para Mateo? ¿Tan mala persona soy?- Dijo ella volviendo a romper en llanto.

-No, no, no- Le dije yo mientras acariciaba su pelo- No sos una mala persona, no pienses eso nunca más.

-Es lo que todos me hacen creer- Me miró a los ojos.

-No, Delfi, tu hermano te dijo eso porque estaba enojado- Intervino Sergio.

-No lo defiendas- Le dijo ella- Si lo dijo enojado lo pensó cuando estaba tranquilo.

-¿Y por eso vas a estar todo el día encerrada y llorando?- Habló el Pocho- Estamos todos acá, Delfi, pasando un día hermoso casi todos juntos como cuando estábamos en la Copa. No pasa seguido esto de juntarnos, no dejes que lo que pasó con tu hermano te arruine el día.

-Pero es mi hermano...

-Olvidate de tu hermano un rato, volvé al patio, disfrutá con todos nosotros- Dijo Ezequiel. El Kun y yo asentimos- Tienen toda una vida para arreglar sus diferencias, ahora simplemente ignoralo y ya está.

-Me da verguenza que los chicos me vean después de llorar así.

-¿Por qué? Vos nos viste a todos llorando después que perdimos la Copa.

-Es distinto.

-Es lo mismo. Dale, bajemos.

Unos minutos más tarde los cuatro nos hicimos presentes en el patio. 

Los chicos estaban hablando entre ellos con cierta tranquilidad. Jorge y Celia tenían a sus nietos en brazos mientras jugaban con los mismos,  Lionel simplemente estaba sentado en la punta de la mesa con el semblante serio mientras que Antonela le hablaba, parecía que lo retaba un poco ya que estaba mirándolo con el ceño fruncido mientras se dirigía a él. Todos se dieron cuenta de nuestra presencia pero ninguno dijo nada. El Kun puso música y, una vez más, fue el alma de la Selección.

-Dale perro, bailen- Animó Sergio y todos, menos mi cuñado, se levantaron rápidamente.

Tomé de la mano a mi novia y sentía que estaba en mi salsa cuando me pusieron música de Rodrigo.

-Cuando salimos en Córdoba te dije que no sé bailar cuarteto- Dijo ella entre risas.

-Y cuando salimos en Córdoba yo te dije que te iba a enseñar- Le guiñé un ojo.

Estuvimos todos un rato bailando hasta que Anto nos dijo que iba a traer el helado que había como postre, por lo que todos volvimos a sentarnos. Pasamos por al lado de Lionel, quien no había bailado nada y él tomó del brazo a Delfi. Yo me quedé a su lado, sabía que Lionel no la iba agredir físicamente, no es un monstruo tampoco, pero capaz que le dice algo que la puede volver a afectar. 

-Delfi...- La miró el como para decirle algo pero ella lo interrumpió.

-Delfi nada, Lionel- Dijo fría y se soltó de su agarre para ir a sentarse al lado de Ángel. Yo miré a mi cuñado haciendo una mueca y luego me fui a sentar al lado del Pipa.

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Dos capítulos en un día... no se pueden quejar. Aprovecho para decirles que estoy escribiendo una nueva novela de Paulo, se llama 'El Guardaespaldas' búsquenla en mi perfil si quieren!!! Muchas gracias por leer, votar y comentar... Nos leemos pronto!