No deberíamos. {Paulo Dybala}

42.

Lunes, 6 de julio de 2015. Rosario, Santa Fe.

Narra Delfi:

Por fin sonó el timbre de salida, todo lo bueno no duraba mucho y yo había tenido que volver a la rutina.

Estaba hablando con mi mejor amiga mientras caminábamos hacia la salida del colegio, ya que teníamos bastante para ponernos al día después de no habernos visto, y hablar muy poco, por un mes.

Me extrañé un poco al ver el auto de mi papá estacionado en la puerta, ya que por lo general siempre volvía a mi casa caminando.

-Vino mi papá- Le informé a Azul- Nos vemos mañana- Dije dándole un pequeño abrazo.

Caminé hacia el auto de mi papá y noté que no era él quien se encontraba dentro, sino que eran Leo y Paulo.

-Paulo- Sonreí- ¿Que hacés acá?- Dije mientras subía en el asiento de atrás.

-Yo también estoy acá boluda- Me dijo mi hermano, quien manejaba- ¿Como te fue?

-No se pasaba más la hora- Me quejé.

-Eso porque querías llegar a tu casa y verme a mi- Bromeó Paulo. Igual tenía razón.- Hoy a la noche salimos a cenar, ¿querés?

-Si, obvio- Sonreí.

(...)

-¿Cuando se van ustedes?- Le pregunté a mi hermano mientras almorzábamos las milanesas caseras que había preparado mi mamá.

-¿Ya nos estás echando?

-No, tarado, por mi quédense a vivir acá, pregunto nada más.

-Ya sé boluda, te jodo. Nos vamos el jueves.

-¿Tan pronto?- Preguntó mi mamá un poco triste.

-Si má, tengo que volver a entrenar- Le respondió mi hermano haciendo una mueca.

-Vos te vas a España, tu hermana el miércoles se va a Córdoba unos días... ya estoy sintiendo el síndrome del nido vacío- Dijo ella y yo reí.

-¿Te vas a Córdoba?- Preguntaron mi hermano y mi cuñada al unísono.

Yo asentí.

-Vas a conocer a la familia, me muero- Dijo Anto con una notoria emoción.

-Suerte con tu suegra...-Dijo mi hermano para hacerme poner nerviosa.

Quizás olvidé de contar ese detalle, si. Paulo me invitó unos días a Córdoba y aprovechamos que es fin de semana casi largo y solo pierdo el viernes de clases. Iba a conocer a su familia y eso era algo que me ponía súper nerviosa, ¿y si les caigo mal? ¿y si no les agrada la idea de que Paulo esté con una chica que todavía vaya a secundaria? ¿y si se llevan una mala impresión mía?

-Así que ya es oficial su relación- Habló mi mamá con una sonrisa.

-No- Negué yo al mismo tiempo que Paulo decía "Si". Todos en la mesa nos miraron confundidos- No me preguntó si quería ser la novia... todavía no es oficial. Cambiemos de tema mejor- Dije un poco colorada.

-Bueno- Rió mi mamá- Así que ahora la próxima vez que nos veamos es en septiembre, ¿no? para el nacimiento de Matu.

-Falta re poquito- Sonreí yo.

(...)

Horas más tarde, con Paulo nos estábamos dirigiendo a un restaurante en el que Paulo había hecho una reserva. Él me ayudó a sentarme, una onda los chicos de las películas, y después se sentó frente a mi.