Reparaciones

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Hoy en la escuela todo iba normal hasta que llegó la hora de salir. Noté que Simon estaba bastante cabizbajo y estresado así que decidí hablarle:

-¡Hola, Simon! ¿Está todo bien?

-Mmmm, no. En realidad no. Lo que pasa es que la directora dijo que están fallando muchos objetos de la escuela: el timbre, la campana, el aire acondicionado y más. Yo le dije que podía reparar lo que sea, ¡y me tomó la palabra! Ahora soy el encargado de arreglarlo todo😞.

-Wow, eso debe ser mucha presión😱.

-Lo es😣.

-¿Y qué tal si te ayudo? No tengo nada que hacer😆.

-¿De verdad?😍

-Claro que sí 😘.

-¡Perfecto! Vamos a mi casa, entonces.

-Bueno, primero planeaba comer, jeje.

-Ah, sí claro. Te veo en mi cuarto cuando quieras ir.

-De acuerdo, Simon. Nos vemos allí😉.

Rápido llegué a mi casa, terminé una tarea que tenía pendiente y comí un poco de pasta a la boloñesa que quedó del día anterior. Eleanor y Teodoro han estado cocinando mucho, vi que estaban haciendo una cosa verde muy extraña😂.

Pero yo estaba ansiosa por ir con Simon a ayudarle. Entre más tiempo estemos juntos es mejor, no importa si sólo estamos reparando cosas 😍.

Me cercioré de que era seguro y me deslicé por el mecanismo hacia la ventana de Simon:

-¡Hola! Ya vine😄.

-Bienvenida, Nat. ¿Lista para empezar a trabajar? 😉

-Nací más que lista😎.

-¡Esa es la actitud! 😁 ¿Por dónde quieres comenzar?

Y así estuvimos toda la tarde reparando cosas... ¡Son demasiadas!😫

Hubo un momento en el que una de las cámaras explotó porque me quité la diadema, la puse en el piso y Simon resbaló con ella mientras tenía las cámaras en la mano:

-¡Oh, no! ¡Simon! ¿Estás bien? 😨

-S-Sí, Natalie. Gracias. Te recomendaría que no pongas tu diadema en el suelo😅.

-Lo siento muchísimo 😞. Ven, voy a limpiarte -dijo sacando mi pañuelo que siempre traigo en mi bolsillo- ¡Estás lleno de polvo! 😝

Mientras le limpié la cara, Simon se me quedó mirando como embobado y sin decir nada hasta que terminé:

-Listo, quedaste perfecto como antes😘.

-G-Gracias, Natalie. ¿No hay problema en que se ensucie tu pañuelo?

-Jaja, claro que no. Para eso es😄.

-De acuerdo, ehm... Sigamos😊

Después pasó que Simon no podía decidir cuál sonido quedaba mejor para el timbre de la escuela, si el de la campana de siempre o el gong que había encontrado arrumbado en el sótano.

Hizo sonar ambas cosas y el simple ruido de los objetos lo estresó mucho, ya que dijo "olvídalo, ninguno de los dos". Me preocupé y no pude evitar acercarme a él para tratar de animarlo:

-Simon, estás muy tenso. ¿Qué te parece si nos tomamos un descanso?

-Pero son muchas cosas, Natalie. Quiero acabar lo antes posible para dejar todo este desastre listo y volver a lo mío.

Parte de Él❤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora