Cuando menos lo esperas, tu vida da un giro y el amor no será la salvación.
¿Dónde queda tu integridad cuando la oscuridad te alcanza?
Caminas, caes, tomas un respiro y miras al frente, siempre al frente porque si volteas, te caes de nuevo.
***
Dos...
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Abril 30, 2013.
Ya la carrera estaba por comenzar, su equipo estaba en posición y todo se encontraba bajo control.
Conocía a sus contrincantes, sabía con quien que se iban a enfrentar y sabía que no sería nada fácil la carrera.
Ya habían tenido unos cuantos desacuerdos con los corredores, por abusadores, habían querido pasarse de listos, pero ella les había dejado bien en claro quien mandaba, quién era ella, nadie se metía con la Diabla, se había encargado de que jamás se les olvidara su nombre, les había dejado un regalito para el recuerdo.
Aún no estaba segura de esa carrera, pero ya todo estaba en curso y Diabla se caracterizaba por no echar nada para atrás.
Estaba en lo alto de la colina observando todo, sobretodo a su equipo ser acosado por algunas fans.
-Diabla ven -llamó Sofi agarrándole del brazo, miró el agarre y luego a ella, la soltó enseguida- lo siento -se disculpó apenada.
-No me agarres del brazo, sabes que no me gusta -advirtió.
-Está bien, lo siento -agacho la cabeza apenada- ¿por qué tanto interés hacia los chicos? Vi que se te iba la mirada hasta allá -la miró con picardía
-Alusinas -rugió.
-Tienes celos ¿cierto? -Molestó.
-No seas estúpida -rodó lo ojos -Franco tiene novia y tu hermanito, tiene que saber elegir sus movimientos -adjuntó
-Lo que tu digas, para mi son celos.. Da igual... Cuñadita -susurró lo último y salió a toda velocidad en dirección a los chicos.
Aceleró su moto y rebasó a Sofi tomando la delantera, llegó hasta los chicos, estacionó y bajó de la moto en un rápido movimiento, caminó hasta ellos logrando llamar la atención de las ... Señoritas, que estaban con ellos.
En cuanto vieron a Diabla acercarse se fueron sin decir palabra, ella rió disimulada de su reacción mientras se colocaba en medio de Sebas y Franco, este último no dudó en pasarle un brazo por los hombros.
-Sólo vinimos a desearles buena suerte -murmuró muy cerca de sus labios.
-Princesa, creo que te equivocaste de novio -interrumpió Sebas molesto, logrando que ella rodara los ojos en respuesta.
-Si eres pesado cuando te lo propones -comentó molesta, él bufó y se cruzó de brazos.
-Gracias Diabla -dijo Franco nervioso dándole un beso en la frente- ya vas a ver que vamos a ganar -aseguró.
