|Capitulo 13°|

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- Espera, hablemos. Sinceramente. - toma mi mano y me lleva hasta el sofá. Esto ya lo tenia contemplado, pero no tengo ganas.

- Ramiro, en verdad no tengo ganas de hablar ahorita.

- Pero yo si tengo ganas de hablar y hablaremos.

- ¿De qué quieres hablar? - preguntó.

- De que ¿por qué te comportas tan indiferente? ¿qué te hizo ella?¿ te lastimo? - lo hizo. Tomo su mano.

- Provoco mi primer corazón roto. Tú no sabes la historia y no es el momento.

- ¿Cuándo será el momento? - suspiro.

- Hasta que ella te provoque tu primer corazón roto. - nos quedamos callados. No entiendo porque él quiere intentar algo, ¿por qué con ella?¿por qué hacerlo?

- Eso es cruel, lo sabes ¿no?

- Cruel es que te involucres con la que ocasionó que le rompieran el corazón a tu hermana. Eso es cruel. Pero es tu decisión, eres tú. Yo ya no tengo nada más que decir, si era lo único que querías saber, voy a dormir. Descansa, Ramiro. - me levanto y le doy un beso en la frente. Camino hacia las escaleras.

- Extrañaba eso. - escucho decir, no me detengo y solo sigo mi camino subiendo las escaleras.

Nunca habia durado tanto tiempo sola, sin él y sin estar jugando con él. Él es el que siempre me hacia compañia y él que me daba comida o se ponían al pendiente de mi.

Ahora hace que una zorra nos separe. Pero el sabrá la clase de persona que es. Y él vendra a decirme que se equivoco. Y se va a equivocar. Siempre quiere estar en la línea de fuego. Y yo no voy a detenerlo.

***

Quiero dormir y seguir durmiendo. Pero la costumbre me hace despertarme a las 7:10 de la mañana. Ahora estoy tan temprano despierta viendo Nick Jr. Porque si, soy una niña por dentro.

Pero me esta dando hambre. Salgo de mi habitación en pijama con pantuflas y despeinada. Sin importarme, porque estoy en mi casa.
Voy a la cocina y tomo un plato hondo para sevirme cereal. Con una pan tostado. 

Cuando tengo mi comida, subo a mi habitación y vuelvo echarme a mi cama. Como mi cereal mientras veo la televisión.

- ¿Puedo pasar?

- Eh, claro. - Ramiro se acerca y se sienta a la orilla de mi cama.

- ¿Por qué estás despierta tan temprano?

- La costumbre. Y ¿tú?...

- Igual. - nos quedamos callados con solo el ruido de la televisión.

***
 

Un amor de verdad. (2 Temporada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora