¿Los sueños se hacen realidad? (Tom Holland y Tu) TERMINADA

El elefante

-¿______? ¿Estás bien?-escucho a lo lejos. Es como si estuviera en una cama muy cómoda, en plena oscuridad.

-¿Qué demonios le sucedió?-pregunta otra voz, una de mujer.

-¿La emoción?-dice otra voz masculina. Me doy cuenta de que hablan en ingles.

-Tranquilos va a estar bien-dice una voz masculina, la conozco. Bueno, todas la conozco, pero esa en especial la conozco. Llevo años conviviendo con esa voz.

-¿Tintin?-murmuro, o lo intento.

-Aquí estoy-dice él en español. Abro los ojos lentamente. Cuatro rostros están fijos en mí, observándome.

-¿Saben que si alguien se desmaya tienen que darle aire, verdad?-digo en inglés, casi de manera automática, en forma brusca. Se alejan.

-Con cuidado-dice Martin.

-Creo que necesitan todos un curso de primero auxilios-digo mordazmente. No sé porque, supongo que estoy de mal humor.

-¿Cómo te sientes?-pregunta Harrison. Lo miro, no sé qué expresaran mis ojos pero definitivamente mi voz es de molestia. Y no sé porque, pero estoy molesta. O no. Agh pienso.

-Bien-digo secamente. Dejo de mirarlo y miro a Martin.-Llévame a casa-le digo en español.

-Lo que tú quieras-me dice el tiernamente.- Tengo que llevar a ______ a casa.

-Pero...-dice Zendaya, y luego se calla mirando a Tom.

He evitado mirarlo. No sé porque estoy así, porque mi estúpido cerebro reacciona así. Quizás el insufrible dolor de cabeza que siento en este momento me ha puesto malhumorada, pero no quiero ver a nadie, quiero irme a una cama y descansar.

-Vamos-me dice Martin.-Anda adelante.

Me levanto con cuidado, con ayuda de Martin, y comienzo a caminar lentamente. Martin está hablando con ellos. Estúpida, ha venido por ti y estas de malhumor, que demonios te sucede me digo. Me detengo y resoplo, he sido una estúpida, que demonios me pasa.

-Denle un poco de espacio, siempre es algo gruñona cuando se desmaya-dice Martin. Abro los ojos como plato y me giro. No, no, no.

-¿Cuándo se desmaya? ¿Es decir que ha ocurrido más de una vez?-pregunta Tom preocupado. Martin, te matare digo en mi cabeza.

Continuo caminando, no quiero darles explicaciones. Ahora estoy más malhumorada ya que Martin les ha contado sobre mis desmayos. Dios, que quieres de mí.

Al llegar al auto, me apoyo y miro al mar. Se me ha pasado un poco el dolor de cabeza. Hace tiempo no me pasaba esto, pero demonios, muchas emociones juntas.

-¿Lista?-me pregunta Martin al llegar, tiene las toallas bajo su brazo izquierdo. Asiento con la cabeza.

-Así que... hablemos del elefante que hay en la habitación-dice Martin, me río un poco. Estamos camino a casa.

Siempre que dice eso, me imagino verdaderamente a un elefante. Pero no, un elefante sería nada de problemas en comparación con esto.

-Prefiero hablar de la hormiga que hay en la habitación-le digo. Nos ha dado luz roja, Martin me mira.

-La hormiga... ¿Qué en este caso sería...?-pregunta Martin.

-Que comeremos cuando lleguemos-le digo, lo miro y le sonrió haciéndome la tonta.

-Como tu quieras, pero el elefante no se moverá-dice.

-Cállate-le digo y nos reímos.

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Para la que no sepa, cuando alguien dice "hay un elefante en la habitacion" hace referencia a que hay algo muy obvio ocurriendo (en este caso la visita de Tom) pero se ignora.